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Publicado por
A. PAPELL
León

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TRAS los forcejeos de los últimos días entre Giscard d'Estaing, presidente de la Convención, y España, que al frente de un grupo de países se oponía a modificar el reparto del poder interno consagrado por el Tratado de Niza, el praesidium de la Convención llegó ayer a un acuerdo de compromiso, que parece gozar de unanimidad, por el cual se mantendrá hasta el 2009 el sistema actual de votaciones y se creará una presidencia de la Unión Europea. En definitiva, el reparto de votos en el Consejo será de momento el del mencionado Tratado, con la posibilidad de prorrogarlo hasta el 2011 si los Estados miembros lo deciden por mayoría cualificada. A partir de este momento, bien en el 2009 o en el 2011, se introducirá el sistema llamado de «doble mayoría», por el cual las decisiones del Consejo deberán contar con el respaldo de los tres quintos de la población de la UE y de la mayoría absoluta de los países miembros. En lo relativo a la Comisión, se preservará el principio de un comisario por Estado miembro, pero a partir del 2009 sólo quince de sus miembros, por rotación, tendrán derecho a voto, lo que supone la creación de comisarios de dos categorías. La fórmula no parece mala, pero necestia acuerdo.