Israel rompe la Hoja de Ruta con otro ataque y siete muertos más

La guerra abierta entre Israel y la organización islámica Hamas es un hecho. Ayer el ejército israelí lanzaba un nuevo ataque aéreo sobre el vehículo de un dirigente de Hamas en Gaza, asesinando a 7 personas, entre ellas dos niños, e hiriendo a más de 40, en el tercer atentado de este tipo en apenas 24 horas, en los que han muerto 18 palestinos. La nueva ola de violencia rompe definitivamente la Hoja de Ruta, en un conflicto en el que el diálogo parece en estos momentos un lejano espejismo. Según relataron testigos de los hechos, Yaser Taha, un destacado dirigente del brazo armado de Hamas, circulaba -con su mujer y sus dos hijos de corta edad- por una calle del norte de la ciudad de Gaza, cuando tres proyectiles lanzados desde dos helicópteros Apache impactaron en su vehículo, que se incendió inmediatamente. Decenas de transeúntes, que intentaban rescatarlos y sofocar el incendio, fueron atacados por un nuevo misil, que mataba a tres de ellos. Taha y su familia murieron carbonizados. Horas antes del ataque, el primer ministro israelí lanzaba un pulso a EE.?UU. -auténtico valedor de la Hoja de Ruta- al asegurar que continuaría combatiendo con todos sus medios al terrorismo, porque no puede esperar a que el gobierno palestino se haga con el control de la situación. El ministro de defensa, Shaul Mofaz, ordenó al ejército emplear todas sus fuerzas para aplastar a Hamas. Además, Sharon volvió ayer a su tradicional dialéctica agresiva, al calificar al primer ministro palestino, Abu, Mazen, de «polluelo sin plumas» al que «tendremos que ayudar hasta que sus plumas crezcan» y describió a los líderes palestinos como «llorones, que dejan al terrorismo operar desenfrenadamente». El ministro de información palestino, Nabil Amro, calificó los insultos como «descripciones tontas» de alguien que no sabe buscar soluciones diplomáticas al conflicto. Mazen se tambalea Lo cierto es que el gobierno de Abu Mazen se tambalea. Según su ministro de Exteriores, Nabil Shaat, la situación es tan difícil que «no sé cuanto tiempo Abu Mazen podrá mantener el control y veo como una posibilidad que se disuelva el gobierno palestino». por lo que Shaat pidió la urgente intervención de Estados Unidos para evitar un «baño de sangre». Por su parte, Hamas, que consideró el atentado contra su líder Rantisi como una «declaración de guerra», ha aconsejado a los extranjeros residentes en Israel que abandonen «la entidad sionista para preservar su seguridad».