Un informe de EE.UU. confirma que el 11-S se podía haber evitado

Los atentados del 11 de septiembre se podrían haber evitado, pero no se pudo detectar su planificación debido a enormes fallos de comunicación entre el FBI y la CIA, que no compartieron la información que poseían acerca de dos secuestradores, dice el informe de una comisión del Congreso de EE.UU. presentado ayer sobre el 11-S. El informe encontró que casi dos años antes de los atentados, la CIA sabía de los vínculos con el terrorismo que mantenían los dos hombres, Jalid al Midhar y Nawaq Alhazmi, que en 2000 se mudaron a San Diego y frecuentaron círculos musulmanes que estaban siendo investigados por el FBI. Según las conclusiones del informe, si ambas agencias hubieran compartido información acerca de Midhar y Alhazmi «se podría haber descubierto los planes para el 11 de septiembre». El documento critica duramente a las dos agencias por su incapacidad para recoger y analizar información de forma conjunta para que encajen las piezas. Los dos organismos de inteligencia se han defendido diciendo que desde entonces llevan trabajando para superar las faltas de comunicación mediante la creación de unidades especiales de supervisión y que la cooperación es cada vez mayor. El informe, que se elaboró tras la realización de 24 sesiones de testimonios con las autoridades, la gran mayoría de ellos a puerta cerrada, es el documento más completo hasta la fecha sobre los fallos que permitieron que 19 personas secuestraran cuatro aviones comerciales sin ser detectadas por las autoridades y los estrellaran contra las Torres Gemelas y el Pentágono. La falta de coordinación entre FBI y CIA no es algo nuevo, pero sí sirve para dar un nuevo tirón de orejas a las autoridades antiterroristas. Las investigaciones del comité han enfrentado muchos problemas, ya que la Administración Bush se resistió en todo momento a proveer la información confidencial que estaba obligada a presentar. Toda una parte larga del documento en la que se refiere a la cooperación de los gobiernos extranjeros como Arabia Saudí, fue borrada a petición del gobierno. Pero a pesar de decir que los atentados se podrían haber evitado, el informe no acusa a la CIA ni al FBI de haber pasado por alto información específica sobre cómo y cuándo se iban a producir los ataques. Otro ejemplo de la falta de seguridad en este país son los sucesos que tuvieron lugar antes de ayer, un consejero municipal, James Davis, murió hoy durante una sesión del consejo en el ayuntamiento de Nueva York tiroteado por un rival político, quien a su vez falleció por disparos de un policía, según informó la Policía citada. El alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, afirmó que James Davis, de 41 años, recibió dos disparos en el pecho y murió a causa de sus heridas en el hospital universitario de Nueva York. El francotirador, Othniel Boaz Askew, de 31 años y de Brooklyn, se encontraba sentado junto con Davis.