Detenida una banda en Londres tras hallar el cadáver de un niño en el río
Diecinueve personas, la mayoría de origen nigeriano, fueron detenidas ayer por la policía británica acusadas de tráfico de niños africanos, en una investigación abierta tras el descubrimiento del torso mutilado de un menor en el río Támesis. Las detenciones se produjeron a primera hora de ayer en nueve viviendas del este de Londres, mediante una redada en la que participaron 200 agentes, algunos de ellos con equipos antidisturbios, según informó Scotland Yard. La operación tuvo su origen en el descubrimiento, cerca del Puente de Londres en septiembre de 2001, del torso de un niño nigeriano de entre 4 y 7 años, al que la policía llama Adam, y que, según creen las autoridades, fue mutilado en un sacrificio ritual. También fueron encontrados unos pantalones de color naranja que sólo podían haber sido comprados en una tienda en Alemania, de acuerdo con la policía. Los detenidos son supuestos integrantes de una banda que introducía ilegalmente a niños y adultos de Africa occidental en el Reino Unido, a través del Continente europeo, y son sospechosos de delitos relacionados con el tráfico de personas y de inmigración. Al menos trece de ellos son nigerianos, aseguraron fuentes policiales. El comandante Andy Baker, de Scotland Yard, indicó hoy que la mayoría de los menores que entran ilegalmente en el Reino Unido son usados como «cebos» en diversos fraudes o como «esclavos» laborales, y sólo una pequeña proporción se dedica al sexo. El policía explicó que se realizarán pruebas de ADN a todos los detenidos para saber si tenían relación familiar con Adam, como se sospecha. Gracias a una serie de pruebas forenses, se ha podido determinar que procedía de una región del sur de Nigeria, entre Ibadan y Benin City, de donde son originarios la mayoría de los detenidos.