La larga agonía de Amina Lawal
La hija de Amina Lawal contempla el llanto de su madre, condenada a morir lapidada
La suerte de Amina Lawal se conocerá aproximadamente dentro de un mes, si no surgen nuevos aplazamientos. Después de sucesivas demoras, la vista del recurso contra la condena de muerte que pesa sobre esta nigeriana de 31 años se celebró ayer ante el tribunal de apelación islámico del estado de Katsina. La sesión sirvió para que los abogados de la defensa apuntalaran los argumentos en contra de la lapidación de esta mujer, que según sentencia previa debiera morir lapidada por adúltera en enero de 2004 en aplicación de la sharía . Sin embargo, el esperado veredicto de absolución se pospuso hasta el 25 de septiembre. La agonía de Amina Lawal continúa. La introducción del presidente del tribunal y autoridad islámica superior del estado de Katsina, el gran cadi Aminu Ibrahim, hizo concebir esperanzas de un desenlace definitivo y favorable para el caso Lawal. Al abrir la sesión reconoció que se trata de un asunto «vital» que ya dura «demasiado». Amina fue condenada en marzo de 2002 a morir apedreada por haber concebido una hija estando divorciada, según la aplicación de la Ley Islámica vigente en los doce estados de mayoría musulmana del norte de Nigeria.