El Gobierno británico cierra su embajada en Teherán tras ser atacada
El Gobierno británico cerró ayer su embajada en Irán después de que fuese atacada, en medio de crecientes tensiones con Teherán por la posible extradición a Argentina de un diplomático iraní acusado de terrorismo. Cinco disparos contra la representación diplomática del Reino Unido en Teherán causaron daños materiales y el cierre temporal del edificio, lo que coincide con la marcha de Londres del embajador iraní, Morteza Sarmadi, llamado a consultas por su Gobierno. Pero el Ministerio británico de Asuntos Exteriores mantiene que las relaciones diplomáticas entre ambos países «no se han deteriorado» y que siguen «sin cambios». «La prioridad en este momento es investigar ese incidente para que no se repita», declaró un portavoz de Exteriores, que expresó su conformidad con las «garantías» ofrecidas por las autoridades iraníes de que el ataque será investigado. El portavoz del Foreign Office precisó que «de momento» no hay una fecha para la reapertura de la embajada británica en Teherán, en torno a la cual han sido reforzadas las medidas de seguridad. «Las relaciones diplomáticas no han cambiado. No ha habido un deterioro de las relaciones» entre el Reino Unido e Irán, insistió ese portavoz. Las relaciones entre Irán y el Reino Unido también se han visto afectadas por la presión ejercida por Estados Unidos sobre el supuesto programa nuclear de ese país y su inclusión en el llamado «eje del mal» junto a Irak y Corea del Norte. Se especula con la posibilidad de que el Gobierno iraní, que ha prometido medidas de represalia contra Londres por la detención de su diplomático, decida la expulsión del embajador británico, Richard Dalton. Las autoridades iraníes acusan al Gobierno de dejar de lado su intención de construir una relación independiente con Teherán para alinearse con George W. Bush. Según un portavoz del Foreign Office, la repentina vuelta de Sarmadi a Teherán no significa que se ha producido «un deterioro en las relaciones» bilaterales. Desde Teherán, la agencia oficial iraní IRNA precisó que el embajador ha sido llamado a «consultas», mientras el diario británico «The Guardian» afirma ayer que Sarmadi «puede que no regrese» a la capital británica. Tras la detención de Soleimanpour, las relaciones entre Londres y Teherán se han enrarecido hasta tal punto que el Gobierno iraní ha amenazado con «fuertes medidas» de represalia y la retirada de algunos diplomáticos en territorio británico. El ex embajador iraní, de 47 años, compareció el pasado viernes ante un juez del tribunal londinense de Bow Street, en una vista del proceso de extradición solicitado por Argentina a las autoridades del Reino Unido. Argentina acusa a Soleimanpour de conspirar en el ataque contra el edificio de la Asociación Mutual Israelita Argentina en Buenos Aires.