El número tres de la organización resultó herido y tres personas murieron en la operación
Israel responde al doble atentado con un ataque contra la cúpula de Hamás
Abu Alá confirma su cargo de primer ministro y anuncia la creación de un gabinete de crisis
De nuevo ayer, el ensordecedor estruendo de un F-16 sobrevoló la ciudad de Gaza. Como en la última ocasión, cuando la Fuerza Aérea israelí intentó asesinar al jefe espiritual de Hamás, el objetivo era una vivienda particular sobre la que soltó una bomba de media tonelada. Se trataba de la casa del número tres de Hamás, Mahmud al Zahar, que resultó gravemente herido al igual que su mujer. En el ataque morían tres personas, entre ellas su hijo primogénito de 23 años, y 20 personas resultaban heridas. La explosión, que destruyó completamente el edificio, causó el pánico entre los escolares de un colegio cercano. Era la cruenta respuesta al doble atentado suicida que un día antes costaba la vida a 16 personas en Jerusalén y en una carretera del suroeste de Tel Aviv, llevada a cabo de forma coordinada por un par de jóvenes de Rantis, aldea al norte de Jerusalén que fue ayer centro de redadas del ejército. Hamás advirtió en un comunicado, tras el intento de asesinato de Al Zahar, que a partir de ahora los edificios públicos y las viviendas israelíes serán objetivo de su organización. «En el pasado evitamos este tipo de ataques, pero el enemigo debe recoger lo mismo que siembra», concluía la nota. Ariel Sharon, de visita oficial a la India, canceló el último tramo de su viaje para regresar anoche a Israel, dónde se reunía urgentemente con su gabinete de seguridad. Fuentes militares adelantaron»duras operaciones en los territorios» palestinos, mientras aumentaban las voces dentro del partido de Sharon, el Likud, pidiendo la deportación del presidente Arafat, encabezadas por el ministro de finanzas, Benjamín Netanyahu. Gobierno de crisis Ante la grave vuelta de tuerca del conflicto, Abu Alá -propuesto por Yasser Arafat para ocupar la jefatura del gobierno- anunciaba formalmente la asunción del cargo y la formación de un gobierno de crisis. El hasta ahora presidente del Parlamento, agregó que en las próximas 24 horas presentará su gabinete para obtener la confianza de los cerca de 80 diputados, y condenó el ataque aéreo sobre la casa de Al Zahar. Mientras, la sede de la gobernación de la Autoridad Palestina, la Mukata, era reforzada anoche con sacos terreros y bloques de cemento ante la posibilidad de una invasión de las tropas israelíes para intentar capturar a Yasser Arafat. A pesar de la petición de Al Fatah a su líder Arafat, para que entregue públicamente todos los poderes al nuevo primer ministro, y del carácter conciliador y pragmático de éste, Israel no parece dispuesta a aceptarle. Su ministro de Defenda, Shaul Mofaz, adelantaba que boicoteará al nuevo jefe palestino por ser un «lacayo de Arafat». «Esperamos un gobierno independiente que acabe con la infraestructura terrorista».