El Gobierno sueco mantiene para este domingo la celebración del referéndum sobre el euro
Muere la ministra de Exteriores sueca por una hemorragia interna
Era una de las más firmes candidatas a la sucesión del actual primer ministro, Goran Persson
La ministra sueca de Asuntos Exteriores, Anna Lindh, falleció durante la madrugada de ayer, a consecuencia de las graves heridas internas provocadas por la cuchillada que recibió este miércoles de un individuo al que la Policía aún está buscando, cuando estaba de compras en un centro comercial de Estocolmo. Lindh, muy apreciada en los círculos europeos por su amabilidad y capacidad de trabajo, era una de las más firmes candidatas a la sucesión del actual primer ministro, Goran Persson. El hospital Karolinska, donde los médicos lucharon por salvar la vida de la ministra durante varias horas, informó del fallecimiento a primera hora de la mañana. Lindh murió a las 5:29 hora local y española, tras haber sido sometida a una intervención de nueve horas que no consiguió frenar la hemorragia. «Con gran pena he sabido que la ministra de Asuntos Exteriores de Suecia, Anna Lindh, murió a las 05:29 de esta mañana, a causa de las heridas que sufrió en un atentado», anunció Persson poco después. «Esto parece irreal», señaló el jefe de Gobierno, visiblemente conmovido, añadiendo que este asesinato «afecta también a la sociedad que hemos construido y en la que queremos vivir». El referéndum sueco sobre el euro se celebrará el próximo domingo como estaba previsto a pesar del asesinato según anunció Persson. «Los partidos representados en el Riksdag (Parlamento) se han puesto de acuerdo. Por tanto, el referéndum tendrá lugar como estaba previsto», declaró el jefe del Gobierno. Había tres posibilidades, explicó: mantener la consulta la fecha prevista, aplazarla un mes, o juntarla a las elecciones europeas el próximo mes de junio. «Las dos últimas alternativas son malas. Puede suceder algo en el intervalo que nos ponga en la misma situación», añadió. Movilización policial Lindh, de 46 años de edad, se encontraba el miércoles por la tarde, a título privado y sin guardaespaldas, en la gran tienda Nordiska Kompaniet (NK), en el centro de Estocolmo, cuando fue atacada por un desconocido. Herida en un brazo, en el abdomen y en el pecho, fue inmediatamente ingresada para ser operada, y con el paso de las horas se fue confirmando que su estado era crítico debido a los graves daños sufridos en el hígado. Según testigos presenciales, el agresor, un hombre de 1,80 de estatura y vestido con uniforme de camuflaje y una gorra, logró darse a la fuga cubierto de sangre sin que nadie le detuviera, abandonando tanto el cuchillo como la gorra en el lugar de los hechos. Según fuentes policiales, la investigación ha movilizado a cientos de policías en todo el país, y no se descarta ni se privilegia ninguna hipótesis. Algunos medios hablan de un intento de robo por tirón que se habría complicado, aunque por el momento todo son especulaciones. Suecia ha decretado la alerta nacional mientras continúa la búsqueda del asesino.