La manifestación para exigir el fin de la ocupación de Irak tuvo muy poco eco en León

Con esta manifestación intentaron continuar la expresión del 15 de febrero. Durante la concentración, se leyó un manifiesto en defensa de la libertad de expresión y en defensa de la paz para todos los ciudadanos y para que se cumplan de una vez por todas, los derechos humanos. El presidente estadounidense, George W. Bush, pidió ayer de nuevo el apoyo internacional a la ocupación y reconstrucción de Irak, a fin de ayudar a la pacificación de todo Oriente Medio. El discurso coincide con las discusiones que se llevan a cabo en la sede de la ONU en Nueva York sobre la nueva resolución, y mientras el Pentágono prepara el envío de más fuerzas militares de la Guardia Nacional ante la falta de contribuciones de otras tropas. El Departamento de Defensa de EE.UU. anunció ayer el traslado a Irak de 10.000 efectivos de la Guardia Nacional del Ejército y que otros 5.000 han sido puestos en alerta para su posible traslado a ese país. «Confío en que más países se colocarán junto al pueblo iraquí para ayudarle a construir un país libre y pacífico», dijo Bush en su discurso radiofónico. Miles de persionas en la calle Varios miles de personas exigieron ayer en Madrid y Barcelona la retirada de las tropas españolas y el fin de la ocupación norteamericana en Irak. Los manifestantes, convocados por los partidos de izquierdas, sindicatos y la Plataforma Cultura contra la Guerra, reclamaron también la paz para Palestina y denunciaron el «crimen de guerra» perpetrado contra el periodista José Couso, asesinado en Bagdad por soldados estadounidenses. Las marchas se asemejaron muy poco a las celebradas antes del estallido de la guerra y fue muy escasa la presencia de líderes políticos y representantes del mundo de la cultura. La manifestación más numerosa tuvo lugar en Madrid, donde se congregaron más de 10.000 personas para exigir la «retirada de las tropas españolas». La ausencia de líderes políticos destacados (el coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, fue el único político de primera fila que participó en la marcha de la capital de España), el ambiente festivo y, sobre todo, la protesta por la «pasividad del Gobierno español» ante el asesinato del cámara de Tele 5 José Couso a manos de tropas estadounidenses marcaron la manifestación. La otra gran marcha tuvo lugar en Barcelona donde 10.000 personas según los convocantes -5.000 según la policía- desfilaron a partir de las 17:00 horas bajo una intensa lluvia y tras una pancarta en la que se podía leer «Fuera las fuerzas de ocupación de Irak y Palestina». La manifestación terminó con un manifiesto leído por el cantante del grupo Sopa de Cabra.