En un avión, sin teléfono, sin datos pero en manos de sus «amigos»

Jean Bertrand Aristide fue secuestrado por los estadounidenses el domingo y obligado a abandonar Haití por la fuerza, afirmó ayer uno de sus amigos estadounidenses, Randall Robinson, ex presidente del instituto Transáfrica, organización que lleva a cabo investigaciones sobre África y tiene su sede en Washington. La Casa Blanca negó rotundamente la información, calificando las acusaciones de absurdas, «El presidente explicó que había sido secuestrado cuando estaba en su residencia en Puerto Príncipe por alrededor de 20 soldados estadounidenses en uniforme de combate y armados. Tras ser sacados de sus viviendas fueron puestos en un avión y nadie les dijo a dónde los llevarían». «No les autorizaron hacer llamadas telefónicas antes de abandonar su casa», precisó Robinson. Robinson agregó que Aristide le llamó horas después «desde un teléfono móvil de Bangui (capital de la República Centroafricana), desde una habitación en la que se encuentra con su mujer y el marido de su hermana». «La habitación no dispone de teléfono ni de televisión. Todo lo que pueden ver a través de la ventana son los soldados franceses y africanos que los vigilan», indicó. En el avión «la señora Aristide intentó levantar la cortina de la ventanilla pero se le ordenó que la bajara. El presidente preguntó dónde se encontraban y el comandante militar que estaba en el avión le señaló que tenía la orden de no decírselo», sostuvo.