EE.UU. intenta a la desesperada negociar con los insurgentes para controlar Irak

Estados Unidos intenta desde hace horas una negociación a la desesperada con los insurgentes que permita firmar una tregua y volver a tomar el control del país a las tropas de la Coalición. Una delegación del Consejo de Gobierno iraquí, bajo control de los Estados Unidos, protagonizó ayer el ultimo intento de mediación en la convulsa Faluya, al intentar negociar con los insurgentes un alto el fuego. La delegación, compuesta por 35 personas, se dirigió en diez vehículos hacia una mezquita de la ciudad donde se encuentra atrincherado un líder local de la revuelta. La influencia que ejercen los líderes religiosos sobre los iraquíes se dejó sentir ayuer claramente. El grupo iraquí armado que tenia secuestrados a tres ciudadanos japoneses anunció ayer que los liberará en las próximas 24 horas. Las autodenominadas Brigadas de los Muyahedin o Guerreros Santos precisan en el texto que tomaron esa decisión en respuesta a la petición que realizó la Organización de Ulemas, la mas importante institución religiosa suní de Irak. Los tres japoneses, un periodista y dos cooperantes, fueron secuestrados el jueves en la carretera que une Bagdad con la frontera jordana. Sus captores habían dado a las autoridades japonesas un plazo de tres días para retirar su tropas de Irak, o de lo contrario quemarían vivos a los rehenes. La amenaza forzó una intervención televisada del primer ministro japonés, que respondió a la conmoción que el secuestro ha generado en su país grabando un vídeo en japonés y árabe en el que asegura que su país es pacifista y que las tropas niponas desplegada en el país están desarmadas. Unas horas antes, las autodenominadas Brigadas del Héroe Mártir Jeque Yasin aseguraron que tienen en su poder a 30 extranjeros -entre ellos variso españoles, japoneses, búlgaros, norteamericanos, israelíes, coreanos e italianos- que serán ejecutados en las próximas horas si Estados Unidos no abandona el cerco de Faluja. El portavoz del grupo, enmascarado y sin dar pruebas de sus palabras, amenazó con matar a los secuestrados, mutilar sus cuerpos y arrastrarlos por las calles. Los representantes civiles y militares de España en Irak aseguraron ayer no tener constancia de que ciudadanos españoles estén secuestrados en este país. Inistió en ello la Embajada española en Irak y el Ministerio de Asuntos Exteriores. Desde Base España y Base Al Ándalus se afirmó que no falta ningún soldado español o de las brigadas formadas por sudamericanos. Tampoco se echa en falta a personal de apoyo, cooperantes o agentes de inteligencia. La batalla por Bagdad Las tropas norteamericanas y los insurgentes iraquíes prosiguieron ayer sus combates en Faluja y abrieron nuevos frentes en Baquba y Bagdad, en una nueva escalada de sus enfrentamientos armados. Miles de soldados estadounidenses y civiles iraquíes participan en los choques entre ambos bandos, que recuperaron como escenario el triángulo suní tras un aparente apaciguamiento en el sur chií. Al menos 450 personas han muerto y más de un millar han resultado heridas en los fieros enfrentamientos de la peor batalla campal que se libra en la posguerra. Adolescentes armados con fusiles de asalto kalashnikov han abierto la batalla por Bagdad y luchan en sus calles.