Blair contraataca poniendo en duda que las fotografías sean auténticas
El primer ministro, Tony Blair, y su ministro de Defensa, Geoff Hoon, se defendieron ayer de las acusaciones de haber ocultado los informes de la Cruz Roja y de Amnistía Internacional sobre las supuestas torturas a detenidos en Irak afirmando que los casos fueron estudiados por los mandos militares británicos. Blair manifestó, durante un breve encuentro con la prensa junto al primer ministro chino, Wen Jiabao, que él no había leído los informes sobre posibles torturas y que sólo tuvo conocimiento de las alegaciones cuando se publicaron noticias en la prensa, la pasada semana. El ministro de Defensa ofreció una versión más completa de la perspectiva del Gobierno en una declaración ante la Cámara de los Comunes, sin olvidar sembrar la duda sobre la autenticidad de las fotos. El Gobierno Blair siempre ha aplicado la política de atacar en los momentos de crisis. Así, Hoon en vez de defenderse de las críticas, lo que hubiera sido visto como una señal de debilidad en esta crisis, aprovechó su comparecencia ante el parlamento para contraatacar al mostrar sus dudas sobre la veracidad de al menos dos de las fotos publicadas por el Daily Mirror . «Hemos investigado estas fotos y tenemos la convicción de que los camiones en los que aparece el prisionero no estaban en Irak en el momento en el que dice que fueron tomadas las fotos», informó Hoon. Perdón, por si acaso Pero, por si acaso, el Gobierno británico respondía también a las acusaciones de haber sido advertido hace un año por Amnistía Internacional y la Cruz Roja de que se cometían abusos con los prisioneros iraquíes, pidiendo disculpas a las víctimas de estos malos tratos y asegurando que se actuó de manera inmediata. AI informó a Downing Street de torturas en mayo del año pasado sin que se tomara ninguna medida y el informe de la Cruz Roja sólo llegó a las manos de Tony Blair y de sus ministros cuando el Daily Mirror publicó las primeras fotos de torturas de prisioneros detenidos por británicos hace dos semanas. Aunque el informe de la Cruz Roja habla principalmente de malos tratos aplicados por las tropas estadounidenses, también se recoge el caso del prisionero Baha Musa, que murió en Basora, ciudad en manos de las tropas británicas. Hoon informó a los parlamentarios que podrían presentar cargos contra dos soldados.