A la caza de tres terroristas fugados con escudos humanos
Las Fuerzas de Seguridad saudíes han puesto en marcha una vasta operación para capturar a los terroristas que el sábado mataron a 22 personas, la mayoría extranjeros no musulmanes, en un complejo residencial de la ciudad de Al Jubar, en la costa oriental del país. Ayer todavía eran visibles en el complejo residencial Oasis de Al Jubar manchas de sangre, agujeros de proyectiles, pedazos de vidrio e impactos de granadas, mudos testigos de la batalla que horas antes entablaron las Fuerzas de Seguridad con el comando de Al Qaida que mantenía secuestrado a 240 rehenes. En la confusión que siguió al asalto final, tres terroristas consiguieron huir llevándose consigo a varios rehenes como escudos humanos. Aunque Riad se niega a confirmar esta versión, los testigos aseguran que los militantes de Al Qaida negociaron a gritos con las Fuerzas de Seguridad y les ofrecieron que dejarían salir ilesos a los rehenes a cambio de que se les permitiera a ellos abandonar el complejo, como así ocurrió, incluso después de que hubieran degollado a nueve occidentales que intentaban huir del cerco. Las autoridades saudíes están preocupadas por la cadena de atentados.