A los 69 días de acceder al poder sufrió un atentado tras el que se ganó la simpatía del pueblo
Muere a los 93 años el ex presidente norteamericano Ronald Reagan
Falleció en Los Ángeles rodeado de su esposa y sus hijos, después de luchar contra el alzhéimer
El ex presidente estadounidense Ronald Reagan, de 93 años, falleció ayer en Los Ángeles después de una larga y penosa lucha contra el alzhéimer. El político y actor murió acompañado de su esposa Nancy y sus hijos, según informaron fuentes próximas a la familia. Abanderado, junto a Margaret Thatcher, de la «revolución conservadora» de la década de los 80 el ex presidente, cuadragésimo mandatario de EE.UU., anunció en noviembre de 1994 que padecía alzhéimer, una enfermedad degenerativa del sistema nervioso central, que le obligó a retirarse de la vida pública. Nacido el 6 de febrero de 1911 en Tampico (Illinois), fue educado por un padre alcohólico, Jack, católico irlandés y demócrata convencido, y por su madre protestante, Nelle, puritana militante. Estudió Economía y Sociología antes de convertirse en comentarista deportivo. Su etapa como actor profesional abarcó el periodo de entre 1937 y 1964, años en los que rodó un total de 53 películas y tuvo el dudoso honor de presidir el sindicato de actores durante la caza de brujas macarthysta, época en la que transitó desde su liberalismo original hacia el conservadurismo. Reagan se casó en 1940 con la actriz Jane Wyman, con quien tuvo dos hijos, Maureen -que falleció en 2001- y Michael, y se divorció ocho años más tarde para casarse, en 1952, con la estrella de cine Nancy Davis, y que se convirtió en una primera dama omnipresente y muy influyente. Carrera política Nombrado gobernador de California en 1966 y reelegido en 1970 con un margen de un millón de votos, se presentó como candidato republicano a la Presidencia tras la caída de Nixon, pero fue derrotado en las primarias republicanas de 1976 por Gerald Ford, quien finalmente perdió frente a Jimmy Carter. En 1980 obtuvo la nominación por el partido republicano y eligió como compañero de campaña al congresista por Texas y embajador George Bush, que le sucedería en el cargo. Reagan derrotó con facilidad a Carter en un entorno enrarecido por la crisis de los rehenes en Irán, los elevados índices de inflación y un cierto desánimo social. En enero de 1981 se puso al frente del país y sólo 69 días después fue objeto de un atentado con disparos. Su reacción al ataque, sumada a su rápida recuperación, le granjeó las simpatías de un pueblo americano que le consideraba alguien cercano, así como la encarnación de algunos de los principales valores del país, y con el que Reagan nunca tuvo problemas para comunicarse.