Irak pide a los gobiernos que no negocien con los secuestradores

La posible retirada de las tropas filipinas de Irak ante las amenazas de muerte a uno de sus ciudadanos ha llevado al Gobierno iraquí a pedir a los estados que tienen tropas desplegadas en su país que no negocien con los secuestradores. La petición de Bagdad a los gobiernos que han sufrido secuestros entre sus ciudadanos no es nueva. Varios miembros del Gobierno de EE.UU, entre ellos el vicepresidente Dick Cheney y el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, ya conminaron a no tratar de llegar a acuerdos con los extremistas iraquíes. La mayoría de los estados afectados han asegurado que aunque hablen con los insurgentes no han pagado ningún rescate o satisfecho sus demandas. «No es sabio permitir ser aterrorizado. No es sabio consentir amenazas e intimidaciones. Una vez que se inicia este camino, se convierte en un callejón sin salida», advirtió Powell en el pasado mes en la cumbre de la Otan en Estambul. Declaraciones contradictorias La ministra de Asuntos Exteriores de Filipinas, Delia Albert, insistió ayer por la tarde en que las tropas filipinas desplegadas en Irak saldrán de allí, pero no concreto la fecha de la partida. «El viceministro de Exteriores, Rafael Seguis, habló con conocimiento y autoridad sobre el Gobierno filipino durante la entrevista concedida a (la cadena de televisión) Al Yazira ayer por la mañana», aseguró Albert mediante un comunicado de prensa. En un comunicado leído ante las cámaras de la televisión qatarí, el viceministro manifestó que «en respuesta a vuestra exigencia, Filipinas retirará a las fuerzas humanitarias tan pronto como sea posible». «Sabemos que el Islam es una religión de paz y gratitud», recalcó Seguis en un mensaje dirigido a los secuestradores. La nota oficial de Albert intenta disipar la duda surgida en este país sobre cuál es la posición exacta del gobierno Filipino respecto a la demanda de un grupo armado iraquí de asesinar al civil filipino Angelo de la Cruz si Filipinas no retira sus tropas de Irak. El ultimátum dado por el denominado Ejército Islámico de Irak a Manila para tener una respuesta venció la pasada madrugada y daba hasta el 20 de julio para que se cumpliera su demanda. Filipinas tiene a 43 soldados y 8 policías en territorio iraquí desempeñando funciones humanitarias y con mandato hasta el 20 de agosto.