El fallo considera anticonstitucionales varios artículos de la normativa
El Constitucional italiano declara ilegal parte de la ley de inmigración
Berlusconi sufre otro varapalo político tras esta decisión justo cuando su gobierno está en crisis
Berlusconi estrechaba ayer la mano al ministro ruso Sergei Lavrov
El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, sufrió ayer un nuevo revés al declarar el Tribunal Constitucional que la polémica ley de inmigración, aprobada por su Gobierno, es parcialmente inconstitucional. En plenas negociaciones para solventar la crisis abierta en el seno de su coalición, Berlusconi se ha encontrado con otra negativa del Alto Tribunal, que en enero pasado ya declaró ilegal la normativa que le concedía inmunidad penal durante su mandato. La decisión del Constitucional conocida ayer se centra en dos artículos de la ley de inmigración apadrinada por los dos principales aliados del Cavaliere, el líder de Alianza Nacional, Gianfranco Fini, y el de la Liga Norte, Umberto Bossi. Los magistrados consideran contrario a la ley que un inmigrante pueda ser expulsado, tras comparecer ante un juez, sin garantías de defensa, y que deba ser arrestado de forma obligatoria si viola la orden de abandonar Italia en cinco días. El fallo señala que el arresto obligatorio viola los artículos 3 y 13 de la Carta Magna italiana, que sancionan, respectivamente, la igualdad de todos los ciudadanos ante la ley y la excepcionalidad de la adopción de medidas de privación de libertad. Entre otras medidas, el texto introduce la toma de huellas digitales a todos los inmigrantes ajenos a la UE que pidan o renueven el permiso de residencia, así como el uso de naves de la Armada para frenar los desembarcos de indocumentados. Desde las filas de la mayoría gubernamental se intentó restar importancia al fallo del Alto Tribunal y a sus efectos.