Los grupos islamistas que operan en Irak capturan a cuatro extranjeros más

Sendos grupos radicales islámicos anunciaron ayer el secuestro de dos camioneros jordanos y dos ciudadanos pakistaníes, mientras que los insurgentes que retienen a otros siete, tres indios, tres kenianos y un egipcio, ampliaron el plazo para que se cumplan sus exigencias antes de asesinarlos. En un vídeo remitido a las agencias de prensa en Bagdad, el primer grupo, autodenominado Brigadas de los Muyahidin , amenazó con decapitar a los dos conductores jordanos en un plazo de 72 horas si su compañía no se retira de Irak. La empresa Rami al-Ouweiss, que suministra al Ejército estadounidense, «será responsable del destino y el asesinato de los dos hombres», identificados como Fayez Saad al-Udwan y Ahmed Salama Hassan, subrayaron los captores. Su captura ha sido confirmada por responsables de la empresa en la capital jordana. Los nuevos rehenes Hassan, vecino del mayor campo de refugiados palestino en Jordania, afirmó ante las cámaras que son «bien tratados», pidió que se cumplan las exigencias de los captores e instó a todos los árabes y musulmanes «a no colaborar con los estadounidenses y ayudar a los insurgentes». Al-Udwan, nacido en la localidad meridional jordana de Shouna, mostró su identificación y se dijo «arrepentido» de haber aceptado un trabajo «sucio» que ayuda «a extender la injusticia estadounidense y ahogar a los niños iraquíes». También ayer, el grupo Portadores de los estandartes negros , anunció que extendía el plazo dado para empezar a asesinar a los siete camioneros de una compañía saudí que retiene, pero no dio otra fecha límite. «En respuesta a la llamada del jeque Al-Dulayni, que encabeza las negociaciones, hemos decido extender el plazo para continuar los contactos, insistir en que la compañía kuwaití se retire, y advertir al Gobierno indio que ataque a los líderes musulmanes, si no que los proteja», dijo un portavoz del grupo. El jeque Hisham Al-Dulayni es el jefe de la Organización de Líderes Tribales iraquíes. En la cinta se podía ver a los secuestrados sentados en el suelo, rodeados por hombres armados y enmascarados. La embajada de Pakistán en Irak explicó que se investiga la cinta y se trata de establecer contacto con los secuestradores.