El referéndum venezolano va camino de no acabar

La Junta Nacional Electoral de Venezuela (JNE) realizará una auditoría entre 150 mesas electorales escogidas al azar para comparar los datos reflejados en las actas de cierre del referéndum del pasado domingo con los comprobantes de votación, indicaron ayer el ex presidente estadounidense Jimmy Carter y el secretario general de la Organización de Estados Americanos, César Gaviria. Aunque Carter y Gaviria aclararon no tener dudas sobre los resultados oficiales proporcionados hasta ahora, pretenden de esta forma disipar las dudas sobre la victoria de Chávez en la consulta del domingo, donde recabó el 58,25% de los votos frente al 41,74% de la oposición, informó la prensa local. El diario El Universal precisó que la auditoría comenzará hoy y que en ella participarán testigos de la oposición. La auditoría se hará en 150 de las 12.358 mesas de todo el país, y en ella los votos físicos serán cotejados con la información de las actas escrutadas en presencia de observadores de la OEA y del CC, así como testigos oficialistas y opositores. El sistema electrónico de voto La misión de observadores de la Organización de Estados Americanos (OEA) reiteró ayer su apoyo a los resultados del referéndum ofrecidos por el Consejo Nacional Electoral, que dan la victoria al presidente, Hugo Chávez, y recuerda que el sistema de la votación electrónica fue «adecuadamente auditado» días antes de la jornada electoral. «En la etapa que antecedió al referéndum, y según lo constatado por los observadores de la misión, el sistema electrónico de votación y de transmisión de datos fue adecuadamente auditado, teniendo todas las condiciones para asegurar el secreto y fidelidad del voto como la transparencia del proceso», afirmó la OEA en un comunicado. Asimismo, antes del 15 de agosto desarrolló los «preparativos internos» para su funcionamiento, mantuvo «numerosas reuniones» con las autoridades del CNE y con los principales actores políticos, y participó en «auditorías y simulacros» de equipos y procedimientos que serían utilizados durante la votación. Por otro lado, reconoció que el día del referéndum se detectaron «algunos problemas y dificultades», en su mayor parte de naturaleza «organizacional», aunque precisó que todos los inconvenientes fueron «resueltos».