Diario de León

| Perfil | Shamil Basáyev |

La conexión afgana

De ateo marxista a islamista radical, el responsable del secuestro de Beslán está considerado como uno de los terroristas más despiadados del mundo sin reparos morales para matar a niños

Imagen de archivo del guerrillero chechén, Shamil Basáyev

Imagen de archivo del guerrillero chechén, Shamil Basáyev

Publicado por
Enrique Clemente - redacción
León

Creado:

Actualizado:

«Hombre cínico y sanguinario, un usurero de la sangre, dispuesto a todo para tener aún más dinero». De esta forma define la prestigiosa periodista rusa Anna Politkovskaya al fanático jefe de la guerrilla fundamentalista chechena. Samil Basayev, de 39 años, ojos marrones y espesa barba negra, dos veces casado y con dos hijos, dado por muerto varias veces, con su pierna derecha amputada, es sin duda uno de los terroristas más despiadados del mundo, capaz de secuestrar y matar a niños. Sin embargo, Andrei Babitski le calificó como un «Che Guevara checheno» y dijo que en la primera guerra (94-96) era audaz, apasionado y lleno de curiosidad intelectual. Las dos versiones no son contradictorias. Basayev, que fue miembro de la Juventud Comunis-ta, ha sufrido una increíble muta-ción en diez años. De tener como ídolo a un ateo marxista como el guerrillero argentino se ha convertido wahabismo (islamismo radical), ha adoptado un nombre árabe, Abdullah Shamil Abu Idris, reza cinco veces al día y se declara esclavo de Alá. «Nuestra divisa es la victoria o el paraíso», dice ahora. Dos hechos poco conocidos de su biografía muestran cómo Rusia y Pakistán (alia-do de EE.UU.) ayudaron en el pasado al actual enemigo público número uno. A comienzos de los 90 Basayev luchó al lado de los rusos en apoyo de los abjasios y contra los georgianos. En aquel entonces demostró su capacidad militar y su brutalidad, como testifica la foto en la que se ve jugando al fútbol con una cabeza humana. El propio Basayev declaró que había sido vergonzoso pelear junto a los rusos, pero que esa experiencia le valió para combatirlos más tarde. Se podría decir que Rusia contribuyó a crear al monstruo como hizo EE.UU. cuando apoyó a Bin Laden en la guerra de Afganistán. Adoctrinamiento islámico Pero hay otro dato mucho más significativo. Gracias a la intervención de los servicios secretos paquistaníes (el ISI), Basayev y sus lugartenientes recibieron en 1994 adoctrinamiento islámico y entrenamiento intensivo en la provincia afgana de Jost, al mando del célebre señor de la guerra Gulbuddin Hekmatyar. Posteriormente fue transferido a Markaz-i-Dawar, en Pakistán, donde completó su formación terrorista y se relacionó con altos mandos militares y de inteligencia paquistaníes. En Afgansitán se vinculó con el veterano muyaidin de origen saudí Jatabb, que creó un campo de combatientes islamistas en Chechenia en 1995. Ese mismo año una tragedia personal radicalizó más a Basayev: varios miembros de su extensa familia murieron en un bombardeo ruso en su ciudad natal, Vedeno. Su fanatismo y crueldad pero la semilla del integrismo intransigente y terrorista ya había sido sembrada por el misterioro ISI, cuyo papel en el surgimiento de los combatientes de la guerra santa fue vital y todavía está por aclarar.

tracking