Acuerdo en Chile para reformar la Constitución
En un paso considerado un hito en la transición a la democracia chilena, que ya lleva 15 años, el Gobierno de Ricardo Lagos y líderes de las principales fuerzas políticas en el Senado acordaron este miércoles remover las huellas que el ex dictador Augusto Pinochet (1973-1990) había dejado impresas en la Carta Magna en 1980. Por este acuerdo, que tiene carácter vinculante, se eliminan las figuras de senadores vitalicios y designados y se devuelve al presidente constitucional la facultad de destituir a jefes de las Fuerzas Armadas. Democracia protegida «Vamos a terminar con el concepto de democracia protegida», celebró el senador democristiano Andrés Zaldívar, de la gubernamental Concertación Democrática, después de dar a conocer el acuerdo que se someterá al tratamiento de las cámaras. «Es un avance gigantesco, un triunfo de la democracia», opinó su colega derechista Alberto Espina, de Renovación Nacional. El acuerdo prevé eliminar en el 2006 las bancas reservadas a ex funcionarios no elegidos por el voto popular, devuelve al poder ejecutivo la facultad de remover a comandantes en jefe e la Fuerzas Armadas y restituye el derecho a votación de chilenos que viven en el extranjero, la mayoría exiliados durante el régimen.