Una negociación permitirá que los candidatos rebeldes de Afganistán acepten el resultado de las urnas
Dos mujeres mezclan las papeletas en el centro de recuento de Kabul
Habrá acuerdo y los candidatos no iniciarán una nueva batalla en Afganistán. Las intensas negociaciones pretenden alcanzar un acuerdo con el grupo de candidatos que habáin pedido la anulación de las presidenciales, principalmente con el principal rival de Hamid Karzaï, Yunus Qanooni. Estas negociaciones, entre la comisión electoral y los candidatos contestatarios se centran principalmente en una eventual reapertura de algunos colegios electorales y la posibilidades de que los candidatos que rechazaron votar en protesta por presuntas irregularidades puedan expresar su voto. La Comisión Electoral afgana pidió ayer a la ONU que forme un comité de expertos, en el que no habrá miembros afganos, para estudiar las irregularidades en los comicios presidenciales y emita un informe sobre las quejas de los candidatos. Mientras, millones de votos son transportados en coche, camión, helicóptero, caballo o asnos a ocho centros regionales altamente vigilados, en algunos casos desde lugares remotos o peligrosos. Una vez llegados a su destino, deberán ser contados y mezclados, antes de que comience realmente el recuento. Además, por razones de seguridad, algunas papeletas no han sido transportadas inmediatamente tras el cierre de los colegios el sábado.