La esposa del «rais», los médicos y la dirección palestina no desconectarán al moribundo
Arafat entra en coma profundo y la OLP promete elecciones a su muerte
Abú Alá se cerciora en París de que el líder palestino carece de capacidad para decidir La larga noche d
Los dirigentes palestinos, la familia y los médicos franceses descartan desconecatr a Yaser Arafat de los aparatos reanimadores que le mantienen con un hilo de vida en el hospital militar de Percy, a las afueras de París. Una hemorragia cerebral agravó la ya precaria salud del rais , sumido en un coma muy profundo, y motivó la propagación de rumores sobre su fallecimiento desde fuentes palestinas. La dirección de la OLP prometió ayer que habrá elecciones en Palestina cuando el «rais» muera para elegir nuevo gobierno y, por lo tanto, nuevo líder. A primeras horas de la noche de ayer, Arafat continuaba agonizante pero aún vivo en la unidad de cuidados intensivos del hospital militar de Percy, que por primera vez ha reconocido oficialmente la profundidad del estado de coma en que se encuentra. La delegación palestina que finalmente pudo visitarlo constató que su cerebro, sus pulmones y su corazón funcionan, aunque la última noticia de una nueva jornada de anuncios y desmentidos sobre su fallecimiento era que los médicos intentaban detener una hemorragia cerebral. Los dirigentes palestinos admitieron que el desenlace puede llegar en «cuestión de horas». Sólo uno de ellos, el primer ministro, Abú Alá, pudo llegar hasta el lecho del rais para comprobar lo crítico del estado en que se encuentra. «Los médicos excluyen categóricamente el envenenamiento y la posibilidad de un cáncer o un tumor, y no tienen ninguna explicación clara a su brusco deterioro», que cabría atribuir a los achaques acumulados a sus 75 años y a las deplorables condiciones en las que ha vivido estos últimos tres años y medio encerrado en la Mukata «con poco oxígeno, en una muy mala situación sanitaria y asediado por el Ejército israelí». La reunión de la cúpula palestina con los médicos que atienden a su líder duró una hora. Constataron que su vida depende de los aparatos a los que se encuentra conectado y excluyen la posibilidad de desenchufarlo. «Nosotros los musulmanes rechazamos la eutanasia», aseguró Shaath, para quien la vida de Arafat depende «de la capacidad de resistencia de su cuerpo y de la voluntad de Dios». Perdón para Suha Los cuatro dirigentes palestinos -Abú Alá, Abú Mazen, Shaath y el presidente del Parlamento- re-gresaron anoche mismo a Ramala dando su misión por cumplida a pesar de los impedimentos de la esposa de su líder, que denunció la existencia de una conspiración para enterrar vivo a su marido. Ayer atribuyeron las acusaciones realizadas por Suha Arafat al nerviosismo por el difícil trance que pasa y se reconciliaron con un abrazo. Antes de marchar fueron recibidos por el presidente Jacques Chirac. En París se espera ahora la llegada del presidente del Consejo Superior del Tribunal Islámico de Cisjordania y Gaza, Taisir Dayout Tamini, amigo de Arafat y que sería además la autoridad competente para declararlo incapacitado, aunque según la delegación palestina es una posibilidad que no se contempla. Mientras la cúpula palestina ofrecía una rueda de prensa en París, en Ramala celebraban sendas reunio-nes con carácter urgente el comité ejecutivo de la OLP y el comité central de Al Fatah, al concluir el ayuno del Ramadán por la tarde. Los palestinos, aseguran, tendrán elecciones. La declaración de la muerte del líder será dada en esa ciudad, de ahí la prisa de los cuatro dirigentes por regresar ayer mismo a Ramala.