Los captores de la rehén británica envían un vídeo con su asesinato

Margaret Hasán, directora de una organización no gubernamental dedicada a la ayuda en países no desarrollados y secuestrada el pasado mes octubre en Bagdad, ha sido asesinada por sus captores, según confirmaron ayer la diplomacia británica y la familia de la fallecida. La noticia llegó a través de una declaración de la Embajada británica a la agencia Reuters: «Una cinta de vídeo parece mostrar el asesinato de Margaret Hasán». No se conoce aún en el Reino Unido el contenido del vídeo ni el método empleado por los secuestradores para ejecutar a su rehén. El marido de Margaret, Tahsin Ali Hasán, pidió a los captores que le devuelvan el cuerpo «para que pueda enterrarla en paz». Según la BBC, la televisión Al Yasira afirmó que tenían la cinta del asesinato desde hace varios días, pero decidió no emitirla. Los tres hermanos de la fallecida emitieron un comunicado en el que afirman: «Hemos mantenido la esperanza cuanto podíamos, pero tenemos que aceptar ahora que Margaret probablemente ha muerto y que al menos ha terminado su sufrimiento. Nuestros corazones están rotos». Michael, Deirdre, Kathryn and Geraldine Fitzsimmons añadieron que su hermana era «una amiga del pueblo árabe y de gente de todas las religiones». Y su comunicado sentenciaba: «Ella no sentía prejuicios contra ningún credo y dedicó su vida a trabajar con los más pobres y vulnerables, a ayudar a quienes no tenían a nadie más». Margaret Hassan nació en Dublín hace 59 años y se educó en Inglaterra -tenía doble nacionalidad irlandesa y británica-; contrajo matrimonio con un estudiante iraquí, con quien se trasladó a Bagdad hace 30 años. Allí llegó a ser, antes de su secuestro, directora de la organización no gubernamental Care, dedicada a la provisión de ayuda a niños o minusválidos y a la promoción de proyectos de desarrollo en zonas desfavorecidas.