Doce naciones iberoamericanas inician la construcción de «un solo país»
Las 12 naciones sudamericanas empezaron ayer en la ciudad peruana de Cuzco la construcción de lo que llaman «un solo país» de 361 millones de habitantes y una deuda externa de más de 315.000 millones de dólares. El presidente de Perú, Alejandro Toledo, anotó que en ese «país» de 17.000 millones de kilómetros, y de un Producto Interior Bruto de 973.000 millones de dólares, se busca, entre otras cosas, una coordinación política para incrementar la capacidad de negociación de los 12 pilares que sostendrán esa «gran nación». Representantes de Venezuela, Colombia, Ecuador, Perú, Chile, Bolivia, Argentina, Uruguay, Paraguay, Brasil, Surinam y Guayana se reunieron ayer en Cuzco para dar el primer paso en la construcción de ese «único país» mediante la constitución de la Comunidad Sudamericana de Naciones. Los sudamericanos intentan juntar sus beneficios comparativos para convertirlas en ventajas competitivas y «dar el salto para conquistar mercados de Estados Unidos, Europa y Asia», según dijo el anfitrión el presidente peruano, Alejandro Toledo. Integración vial «Esta integración sólo tiene sentido si le ponemos venas que recorren a este nuevo pueblo», señaló al referirse a la integración vial. En ese sentido, Brasil y Perú dieron el primer paso al acordar la construcción de una carretera interoceánica de 1.200 kilómetros que «elimina las fronteras», según Toledo. Para el presidente boliviano, la infraestructura vial, energética y de telecomunicaciones es fundamental en la conformación de la Comunidad Sudamericana que, según su colega de Venezuela, Hugo Chavez, puede concretarse en unos 20 años. Mesa instó a recordar los errores del pasado para no repetirlos y a potenciar las ventajas de la Comunidad Andina de Naciones (CAN) y el Mercado Común del Sur (Mercosur), pilares sobre los cuales se asienta la Comunidad Sudamericana. Destacó la solidez institucional de la CAN y los avances en asuntos relacionados con la unión aduanera y el concepto de arancel común del Mercosur, organismos que no se absorberán mutuamente sino que se complementarán. El presidente boliviano indicó que se puede trabajar sobre la idea de fondos de compensación que reconozcan, igual que en Europa, las diferentes velocidades en el desarrollo de los países.