«Quedarse es también ayudar»

Karrer pasea junto a la playa de Mount Lavinia, a unos diez kilómetros al sur de Colombo. Camina por el medio de la vía del tren que discurre paralela al arenal y a los escombros de las casas Vio llegar la gran ola desde la ventana. «Tuve miedo -dice- pero todo pasó en menos de una hora y decidí quedarme». 1397058884 Pocos días después de la tragedia llegaron a Europa imágenes con turistas tomando el sol, mientras la gente seguía buscando desaparecidos. ¿No cree que eso es una provocación? - La vida sigue. Hay que ayudar, pero no hay porque escapar. -Pero, ¿no tuvo miedo? -Yo estaba en la habitación de mi hotel. Sentí un ruido grande y vi llegar la ola. El agua entró en la habitación, me empujó y dejó todo encharcado. -Y aún así se quedó. -Seguir de vacaciones es otra forma de ayudar. Aquí viven del turismo.