Un ministro libanés acusa a Chirac de alentar a la oposición anti-siria

El ministro libanés de Defensa, Abderrahim Mrad, acusó ayer al presidente francés Jacques Chirac de alentar a la oposición, que el viernes llamó a los libaneses una «intifada (levantamiento) pacífica por la independencia» de Siria. «Cuando el presidente Jacques Chirac vino al Líbano ignoró por completo al gobierno, al jefe del Estado y a todo el mundo», dijo Mrad a Tele Líbano, la cadena de televisión oficial. Chirac llegó el miércoles en visita privada al Líbano para presentar sus condolencias a la familia de Rafic Hariri -de quien era amigo-, asesinado dos días antes en un atentado en el centro del Líbano. Según Mrad, el presidente francés vino a «acusar, ayudar y alentar a la oposición a la escalada». El Ministerio francés de Exteriores recomendó ayer retrasar los viajes a Líbano «que no tengan un carácter de urgencia», tras el atentado. «Con motivo del impacto político de este evento, de la emoción creada en el país y de las eventuales repercusiones sobre su estabilidad, se recomienda postergar todo viaje a Líbano que no tenga un carácter urgente y de anular en los días próximos todo desplazamiento que no sea indispensable», indicó el Ministerio en su página de internet. Fuerza de los sectores sirios Por su parte, los sectores prosirios empezaron ayer a hacerse oír tras los llamamientos de la oposición. El líder del movimiento chií libanés Hezbolá, jeque Hasan Nasralah, criticó ayer de la intifada. El problema de la presencia militar siria en Líbano «no se debe resolver en las calles sino a través discusiones y de un diálogo nacional», afirmó Nasralah en un discurso con ocasión de la conmemoración chií de la Achura. Por otra parte, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, enviará un equipo a Beirut en los próximos días en respuesta a una petición del Consejo de Seguridad para investigar el asesinato del ex primer ministro libanés Rafic Hariri. El periódico kuwaití Al Seyassah señaló ayer que el asesinato de Hariri fue planificado por militares sirios de alta graduación. Según el diario, dos generales sirios, uno de ellos cuñado del presidente Bachar al Assad, y un general libanés se encuentran detrás de la decisión de asesinar a Hariri.