Bush prohíbe al Sinn Fein recaudar fondos en EE.?UU.

El líder del Sinn Fein, Gerry Adams, optó por poner al mal tiempo buena cara al restar ayer importancia a la negativa del presidente George W. Bush de invitarle a la Casa Blanca en el marco de los actos oficiales para conmemorar el Día de San Patricio, el próximo jueves. A este cambio de actitud se han sumado otras voces, como la del veterano senador demócrata Edward Kennedy, quien tampoco se reunirá con él como era habitual. Adams, que está de gira por Estados Unidos desde el pasado sábado, dijo durante una presentación en el Consejo de Relaciones Exteriores de Nueva York, que se siente «decepcionado» por la decisión de Bush, que pone fin a una costumbre de 10 años, aunque señaló que sigue creyendo que Washington está comprometido con el proceso de paz de Irlanda del Norte. «¿Debo interpretar esto como un movimiento del Gobierno Bush para alejarse del proceso de paz? No, no lo hago», dijo el líder del Sinn Fein, considerado brazo político del IRA. Añadió que el pasado reciente «habla por sí solo», en alusión a los compromisos adoptados por su partido en los últimos años. «Allí había un conflicto que ya no lo es. Tampoco es una paz perfecta pero es un proceso de paz», señaló ante académicos y analistas. La presencia de Adams y otros líderes irlandeses en Estados Unidos con motivo de las celebraciones del día nacional de Irlanda, está empañada por el reciente resurgimiento de la violencia en el país. En particular, por el atentado de un hombre católico, Robert McCartney, a las puertas de un pub en Belfast, y en el que ha sido involucrado el Ejército Republicano Irlandés (IRA). En un gesto considerado algo más que simbólico, Bush ha preferido en cambio recibir ahora a cinco hermanas del fallecido en la residencia presidencial. Además de no haber sido invitado a la Casa Blanca, Adams tampoco se podrá entrevistar con Edward Kennedy, de ascendencia irlandesa.