Bomberos españoles rescatan en Indonesia a un niño sepultado por los escombros durante tres días

Bomberos españoles del equipo de Médicos del Mundo rescataron a un niño de 13 años que llevaba 52 atrapado entre los escombros de una casa en Gunung Sitoli, la capital de la isla Nias, una de las zonas de Indonesia más afectada por el terremoto de 8,7 grados de magnitud del lunes. «Empezamos el rescate a las once y media de la noche de ayer, miércoles). Nos llamaron porque habían oído voces en un edificio», explicó hoy, jueves, Mariano Polo, de Albacete (España) en el Centro de Coordinación de Asistencia Humanitaria de Gunung Sitoli. El rescate duró tres horas y media en las que no dejaron de hablar al niño para tranquilizarle y en cuanto pudieron le pasaron a chico un tubo para que pudiera respirar, y después una linterna para que se sintiera más seguro. Gente local les prestó el material necesario para el salvamento, como un generador eléctrico y radiales para cortar el acero y poder acceder al niño. Poco a poco, los bomberos españoles se abrieron camino hacia él y consiguieron sacarle. «Tuvo suerte. no tenía ni un solo rasguño. Al salir sonrió y nos dijo thank you , pero después cerró los ojos y se tumbó», comentó Polo. El menor fue trasladado a un hospital para que le atendieran de presunta deshidratación y le dieran de comer, porque llevaba 52 horas sin agua ni comida. Entre los restos de la casa encontraron también el cadáver de su hermana mayor. Los bomberos españoles prosiguieron ayer la búsqueda de más supervivientes, pero sin suerte. «Hemos ido a un sitio donde nos han dicho que habían oído voces, pero después de tres o cuatro horas no hemos encontrado personas vivas. Yo he visto dos cadáveres, pero han dicho que había siete y por el olor seguramente había más», dijo Polo. El del lunes es el segundo terremoto que sacude la isla de Sumatra (Indonesia) en tres meses; el primer causó 126.000 muertos y 94.000 desaparecidos.