Akáyev acepta firmar su dimisión como presidente de Kirguizistán

Una delegación del Parlamento kirguís viajó anoche a Moscú para negociar con el depuesto presidente Askar Akáyev su renuncia y recibir su solicitud formal de dimisión para poner fin a la crisis institucional en el país. La presidenta del Tribunal Constitucional de Kirguizistán, Cholpón Bayékova, anunció ayer que Akáyev, derrocado el 24 de marzo por una rebelión popular liderada por la oposición y refugiado en Rusia, ha aceptado presentar por escrito su dimisión. Bayékova declaró que Akáyev «sigue siendo presidente» y que su renuncia permitiría resolver el problema de la legitimación de las nuevas autoridades, pero avisó que las elecciones presidenciales anticipadas tendrán lugar en junio «independientemente de si dimite o no». «Hay un acuerdo entre Akáyev y la comisión parlamentaria de que presente su petición de dimisión compulsada ante notario», indicó Bayékova al recordar que el Gobierno no garantiza la seguridad personal del mandatario huido en caso de que vuelva a Bishkek. Akáyev expresó ayer su disposición de renunciar a su mandato presidencial, que formalmente vence el 30 de octubre, ante el Parlamento del país, como establece la Constitución, y por ser esa Cámara el único órgano legítimo de poder en Kirguizistán. La única condición que puso es que se le den «garantías de seguridad personal» y que se respete el procedimiento legal de su dimisión como presidente de este país ex soviético de Asia Central. Sin embargo, el primer ministro y presidente interino, Kurmanbek Bakíyev, afirmaba ayer que no puede garantizar la seguridad de Akáyev y que éste «no debe venir a Kirguizistán ni por cinco ni por diez minutos», pues «provocaría mucho descontento» entre la población. «Si los emisarios de la comisión se reúnen con Akáyev y traen a Bishkek su solicitud de renuncia legalizada, el Parlamento podrá aprobarla y así acabará con la tensión política y social por la cuestión de la legitimidad del nuevo poder», señaló Bayékova. Pero agregó que «la convocatoria de las elecciones presidenciales para el 26 de junio sigue legal, y los comicios se celebrarán en cualquier caso, independientemente de si Akáyev presenta su dimisión o no». El presidente del Parlamento kirguís, Omurbék Tekebáyev, confirmó que «existe el consentimiento verbal del jefe de Estado para que presente su dimisión» y que ésta tendrá parte «en Moscú, y no en Bishkek», aunque el propio Akáyev aún no certificó ese acuerdo. «La convocatoria de las elecciones presidenciales para el 26 de junio es legal, y los comicios se celebrarán en cualquier caso, independientemente de si Akáyev presenta su dimisión o no» CHOLPÓN BAYÉKOVA Presidenta del Tribunal Constitucional de Kirguizistán