Familiares de soldados muertos en Irak prometen demandar a Blair

En la recta final de la campaña electoral británica, la guerra de Irak sigue sin dar tregua a Tony Blair. El último episodio llegó ayer de la mano de los familiares de los soldados muertos en Irak. Pero los ataques personales contra Blair no ponen en peligro su reelección por tercera vez, entrando en la historia de la política británica. Anthony Wakefield fue el lunes el último soldado en caer en el país árabe, aumentando las bajas británicas a 87. Sin tiempo para llorar su desaparición, su viuda, Ann Toward, arremetía ayer contra Blair y le acusaba de haberlo enviado a la muerte. «No tenía que haber enviado el Ejército a Irak, no tenía que haber hecho lo que hizo», señaló. «Si Blair no le hubiera enviado a la muerte mis hijos tendrían hoy padre, realmente le culpo por ello». La mujer también contó cómo había pedido a su marido que no viajara a Irak, pero éste le dijo que era su trabajo. Blair respondió a Ann mostrando su pesar y añadiendo que «los soldados han realizado una labor extraordinaria ayudando a Irak a establecer una democracia estable. Por haber mentido Al mismo tiempo los familiares de otros diez soldados muertos en Irak amenazaron con emprender acciones legales contra el primer ministro por haber «mentido» sobre las razones para ir a la guerra. Este grupo, denominado Familiares de Militares Contra la Guerra, entregó una carta en Downing Street donde explican al primer ministro sus planes de llevar al Gobierno a los tribunales apoyados en la Convención Europea de Derechos Humanos. Sus abogados aseguran que sus clientes tienen un 50% de posibilidades de ganar el caso. También están considerando adoptar medidas judiciales con-tra el propio Blair, acusándolo de cometer crímenes de guerra. «Le perseguiremos ahora que es primer ministro y cuando deje de serlo», advertió Reg Keys, padre de un fallecido y que se presenta como candidato en la circunscripción de Blair.L Las acusaciones no parecen afectar al electorado, que ayer una vez más daba el triunfo a los laboristas, en todos los sondeo. Si se cumple el pronóstico, Tony Blair igualará en reelec-ciones a Margaret Thatcher, siendo esta la tercera vez que alcanza el poder en ocho años, desde que en 1997 con 43 años se convirtió en el primer minis-tro más joven desde 1812. La única duda de Blair es saber cómo actuará ese 36% del electorado, según The Financial Times , que afirma que podrían cambiar su voto en las horas previas a la apertura de los colegios electorales. Este daba al laborismo un 39% de la intención de voto, el 29 % a los tories y el 22% a los liberales. Con estos márgenes, los laboristas obtendrían 141 escaños, 20 menos que en la anterior legislatura. «Mis hijos aún tendrían hoy un padre y realmente le culpo (a Blair) por lo que ha hecho» ANN TOWARD Viuda de un soldado muerto en Irak