Los incidentes tienen que ver con el jucio contra los componentes de una organización extremista
Un grupo islámico encabeza una revuelta popular en Uzbequistán
Un número indeterminado de personas murió en los desórdenes callejeros
Los violentos enfrentamientos que ayer asolaron la localidad de Andizhán, situada en el extremo oriental de Uzbekistán, junto a la frontera con Kirguizistán, parecían el comienzo de una nueva revolución dentro del espacio ex soviético, pero todo parece haber quedado sólo en una acción armada del islamismo radical, aunque sea una de la más graves que se recuerdan, que terminó siendo abortada a sangre y fuego al caer la noche. Decenas de personas perdieron la vida o resultaron heridas en los choques registrados entre militantes islámicos y fuerzas del Ejército. Víctimas de los disparos fueron también los participantes en una nutrida concentración en el centro de Andizhán. La trágica jornada comenzó con el asalto a una cárcel y la liberación de miles de reclusos. El origen de los incidentes tiene que ver con el juicio que se celebra en Andizhán contra 23 personas acusadas de pertenecer a la organización extremista denominada Akramiya. Terrorismo e intento de golpe de Estado son algunos de los cargos presentados contra los detenidos. El pasado miércoles, unas cinco mil personas se manifestaron frente al edificio del tribunal exigiendo la liberación de los reos. Las organizaciones uzbekas de derechos humanos sostienen que los 23 encausados son simplemente hombres de negocios y se les persigue por motivos políticos. Sea como fuere, lo cierto es que en su ayuda acudieron numerosos hombres armados que, tras asaltar un cuartel y hacerse con abundante armamento y munición, se trasladaron después al penal de Andizhán. Allí pusieron en libertad a todos los presos, incluidos los 23 presuntos miembros de Akramiya, Hermetismo Tanto el ataque contra la unidad del Ejército como el asalto a la prisión provocaron sendas refriegas con las fuerzas de seguridad que se saldaron con una decena de muertos, según fuentes oficiales, aunque las agencias rusas creen que el número de víctimas fue mucho mayor. De camino hacia el centro de Andizhán, hubo un momento en el que, según la agencia rusa RIA-Nóvosti, los islamistas trataron de hacerse fuertes en una escuela. «El régimen tilda la insurrección de islámica para aplastar la rebelión de manera sangrienta» MUHAMED SALIJ Líder del Partido Democrático ERK