Prisiones investiga por qué el cabecilla islamista compartía mesa en el comedor con otros presos
Abú Dahdah, líder de Al Qaeda en España, recibe una paliza en la cárcel
Presos comunes le rompen la mandíbula, la nariz y un diente tras culparle del 11-M
Ian Blair, comisario jefe de la policía británica, visitó ayer barrios de mayoría musulmana
Un grupo de entre tres y cinco presos agredieron ayer en la cárcel de Castellón a Imad Edim Barakat Yarkas, Abu Dahdah , el supuesto jefe de la célula española de Al Qaeda que fue detenido en noviembre del 2001 acusado de haber colaborado en los ataques del 11-S en Estados Unidos. El supuesto terrorista terminó ingresado en un hospital con la mandíbula rota, entre otras lesiones. Fuentes penitenciarias informaron que los incidentes tuvieron lugar a las 8,30 horas, cuanto el integrista desayunaba en el comedor de la prisión acompañado de otros reclusos, horas después de llegar desde Madrid, donde había estado preso en las últimas semanas mientras duraba el juicio contra la célula que él mismo dirigía y en el que se enfrenta a un petición de 74.337 años de cárcel. En un momento dado, uno de los internos increpó a Abu Dahdah , al que responsabilizó de los atentados del 11-M en Madrid. Ante el cariz que tomaban los acontecimientos, los dos funcionarios que acompañaban al hispano-sirio decidieron llevar a otro lugar al preso, momento en que un grupo de entre tres y cinco internos se abalanzó sobre el supuesto cabecilla terrorista. Pese al intento de los trabajadores de prisiones por alejar a los agresores, varios presos golpearon y patearon a Barakat, quien sufrió una fractura de mandíbula, rotura de los huesos de la nariz, la rotura de un diente y un derrame en un ojo. El presunto activista fue trasladado de urgencia al Hospital de Castellón, donde quedó ingresado en observación. La Dirección General de Instituciones Penitenciarias ha abierto una doble investigación: por un lado, para aclarar todos los extremos de los incidentes y las personas implicadas en la paliza, y, por otro, saber por qué el líder islamista compartían mesa en el comedor con otros internos cuando todos los acusados de terrorismo islámico encarcelados están en régimen de aislamientoEl PP, a través de su portavoz de Interior, Alicia Sánchez Camacho, pidió la dimisión de la directora de prisiones, Mercedes Gallizo, por no ser capaz de garantizar la seguridad de un preso de esta envergadura.
