Más de 200 islamistas han sido detenidos en Pakistán tras el 7-J

Las autoridades paquistaníes han detenido a más de 200 presuntos islamistas en redadas policiales llevadas a cabo tras los atentados del 7 de julio en Londres, porque tres de los cuatro terroristas habían viajado recientemente a Pakistán, según fuentes oficiales. Decenas de escuelas coránicas (madrasas) y oficinas de organizaciones islámicas han sido registradas en Islamabad, Karachi (sur), Lahore (este) y Multan (centro), afirmó un responsable del ministerio del Interior, que afirmó que el presidente paquistaní, general Pervez Musharraf, había dado «órdenes claras» para disminuir el extremismo y aplicar una «tolerancia cero» a los que prediquen la violencia religiosa. «No hemos arrestado a ningún sospechoso que mantenga un vínculo directo con los atentados en Londres», declaró a la AFP otro responsable de los servicios de la lucha antiterrorista. Sin estar directamente relacionados con la investigación sobre los atentados en Londres, estos arrestos están destinados a combatir los círculos extremistas que podrían haber suministrado ayuda o alojado a militantes extranjeros. El encargado de estas redadas asegura que se trata de «eliminar la red de madrasas» que facilitan una formación terrorista a los militantes. Pero uno de sus colegas que trabaja en los servicios secretos paquistaníes reconoció bajo anonimato que las operaciones son para mostrar al mundo que Pakistán actúa contra los extremistas.