La policía británica inicia el mayor despliegue tras la Guerra Mundial

Las estaciones del metro de Londres estaban ayer atestadas de chalecos reflectantes de los agentes de policía que patrullaban por los accesos y los túneles del laberíntico metro de la capital británica. El motivo es la alarma general en la que vive Londres tras la confirmación por parte de Scotland Yard de que puede haber más células terroristas dispuestas a atentar en cualquier momento. El primer ministro británico, Tony Blair, calificó la operación policial que se registra en el país como «la mayor desde la Segunda Guerra Mundial». Miles de agentes están dedicados a la lucha antiterrorista desde los atentados del 7-J y de los fallidos del 21-J, y docenas de agentes del MI5 y el MI6 trabajan en colaboración con los departamentos especiales antiterroristas para atrapar a los autores de los ataques y esclarecer si existen más células operativas cercanas a Al Qaeda en el Reino Unido. «Hay muchas posibilidades de que los terroristas que andan sueltos vuelvan a atentar otra vez, y no sólo son objetivos los medios de transporte», indicó ayer sir Ian Blair, máximo cargo de la Policía Metropolitana. Indicó además que la célula que atentó el 21-J «no eran aficionados, cometieron un error, por lo que hemos tenido mucha suerte». Según The Times , las bombas de los atentados del 7 y 21 fueron fabricadas por la misma persona, hecho este que provoca mayor inquietud en Scotland Yard, ya que demostraría que se trata de una célula terrorista bien organizada y con amplias ramificaciones. Como parte de esta carrera contra reloj de la policía para evitar otra masacre, la policía detetuvo ayer a nueve sospechosos en dos viviendas del barrio de Tooting, en el sur de Londres, todos ello relacionados con los sucesos del 21-J. Scotland Yard precisaba que entre los detenidos no se encuentran los tres presuntos autores de los atentados. Mientras tanto, la policía continuaba ayer con los interrogatorios del somalí Yasin Hassan Omar, sospechoso de haber colocado una de las cuatro bombas que no llegaron a explorar el 21-J. También están siendo interrogadas tres mujeres que fueron detenidas el miércoles. «Hay muchas posibilidades de que los terroristas que andan sueltos vuelvan a atentar otra vez, y no sólo son objetivos los medios de transporte». IAN BLAIR Comisario jefe de la Policía Metropolitana de Londres