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El desafío iraní de retomar la actividad nuclear en Isfahán aúna a los europeos para evitarlo

El pulso entre Irán y la UE se acerca al Consejo de Seguridad de la ONU

Un informe de EE.UU. señala que Teherán necesitaría 10 años para fabricar una bomba nuclear

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Óscar Santamaría - corresponal | nueva york
León

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El pulso que mantiene Irán con la troika europea formada por Alemania, Francia y Reino Unido, podría estar cada vez más cerca de llegar al Consejo de Seguridad de la ONU. Al menos, con ello amenazaron los europeos a Teherán después de que volviera a desafiar a la comunidad internacional al anunciar el lunes que reanudará parte de su programa nuclear en su central de Isfahán. Lo hará en dos días, según dijo ayer, y sin tener en cuenta el acuerdo alcanzado con la troika el pasado noviembre, en el conocido como pacto de París. Irán dejó claro que su decisión es irreversible y sigue defendiendo que su programa nuclear tiene fines civiles, no militares. Tácticas de negociación En una carta firmada por los ministros de Exteriores de estos países y por el alto representante de Política Exterior y de Seguridad de la UE, advirtieron al régimen iraní de que, si cumple su amenaza, darán por terminadas las negociaciones. Plantearon incluso la posibilidad de recurrir al Consejo de Seguridad de la ONU, con capacidad para dictar sanciones. Esta opción es apoyada firmemente por la Casa Blanca, reacia a la estrategia europea de ofrecer a Irán incentivos económicos, políticos y comerciales a cambio de que suspenda sus actividades de enriquecimiento de uranio. Por otra parte, un informe de los servicios de inteligencia estadounidenses señaló que Irán necesitará diez años para poder desarrollar la tecnología necesaria para fabricar una bomba nuclear. Este plazo es el doble del que hasta ahora había mantenido el Gobierno de Bush. El informe, filtrado ayer por el diario norteamericano The Washington Post , ofrece datos y detalles que podrían hacer pensar que Teherán está realizando actividades secretas, aunque precisa que no puede establecerse un vínculo entre éstas y la reanudación de un programa nuclear clandestino.