Guerra por la guerra

Un pequeño ejército de partidarios de la guerra en Irak se estableció ayer en Crawford, al sur de Texas, lugar de veraneo del presidente George W. Bush, para enfrentarse con los opositores al conflicto, que están acampando en el lugar desde hace varias semanas. Manifestantes y contramanifestantes -que portan grandes banderas estrelladas- han tomado el pequeño poblado de 750 habitantes instalado en el cruce de una carretera y de una vía ferroviaria secundarias, castigado por el aplastante calor del verano. El sábado, los termómetros rozaban los 40 grados. Pero eso no impidió las primeras escaramuzas entre ellos, que terminaron con la intervención de la policía y la detención de varios manifestantes, que fueron conducidos al calabozo por varios sheriff. Dos nombres están en la boca de todos: el de Cindy Sheehan, una californiana de 48 anos que encarna el creciente movimiento antibélico después de haber perdido a su hijo Casey, muerto en Irak en abril del 2004 unas semanas después de su llegada; y el de Garry Qualls, cuyo hijo también fue asesinado en Irak pero que no admite que los que se oponen a la guerra planten una cruz en su nombre. El campamento de los partidarios de Bush, de 1.500 personas, estableció su cuartel general bautizado Fort Qualls en el centro de Crawford y preparan varias marchas. Decenas de personas que apoyan a Cindy Sheehan esperan también refuerzos y continúan su vigilia de la paz en Camp Casey, su campamento situado cerca del rancho de Bush, bautizado como la Casa Blanca del oeste .