Los expertos creen que 160.000 viviendas son irrecuperables

Los barrios históricos de Nueva Orleáns, menos afectados por las inundaciones, pueden salvarse, pero el resto será limpiado y alisado para que las futuras construcciones queden a salvo de las catástrofes naturales. En opinión de los expertos, unas 160.000 viviendas son irrecuperables y barrios enteros deben ser totalmente reconstruidos. «Entre 140.000 y 160.000 viviendas, es la cifra que manejamos, están bajo las aguas y son literalmente irrecuperables», declaró Mike McDaniel, secretario del Departamento de Calidad Ambiental de Luisiana. Ante una situación que podría dejar a más de 500.000 personas sin hogar durante meses, los especialistas sugieren aprovechar la catástrofe para tomar medidas drásticas que permitan evitar una repetición de la tragedia y refundar la ciudad. Reconstrucción Para Klaus Jacob, geofísico de la Universidad de Columbia, en Nueva York, la reconstrucción de Nueva Orleáns tal como era antes del paso del huracán no tiene sentido, dados los peligros que la amenazan. «¿Por qué reconstruir la ciudad a 10 pies (unos tres metros) bajo el nivel del mar, justamente para permitir que vuelva a ser destruida?», escribió el investigador en The Washington Post . Jacob subraya que la subida prevista del nivel del mar, entre 30 centímetros y un metro, antes del fin del siglo XIX, aumentará la amenaza. Según él, ningún dique, ni siquiera reforzado, podrá proteger a la ciudad contra el asalto directo de otro huracán. La ciudad, fundada por los franceses en 1718, fue construida entre el río Misisipi y el lago Pontchartrain en una cuenca rodeada de diques, muchos de los cuales cedieron ante la embestida de las aguas empujadas por Katrina , que sumergieron al 80% de la ciudad. El Barrio Francés, principal atracción turística, así como el distrito Garden, donde hay lujosas mansiones coloniales anteriores a la guerra de Secesión, han sido poco tocados por las aguas y deberían ser recuperados rápidamente. Pero Jacob cree que «es preciso iniciar la desconstrucción planificada de Nueva Orleáns». Con este panorama y ante la magnitud de la catástrofe la popularidad del presidente George W. Bush está en su cota más baja, a pesar de que la Casa Blanca argumenta que las autoridades federales no deben tener en exclusiva las responsabilidadesLa respuesta de Bush a la crisis fue considerada «mala» o «terrible» por el 42% de los estadounidenses consultados por Gallup para la cadena CNN y el diario USA Today , dada a conocer ayer, en comparación con un 35% que dijo que fue «buena» o «muy buena». El desempeño del Gobierno federal recibió las mismas calificaciones, mientras que la respuesta local fue evaluada negativamente por un 35% y positivamente por un 37%.