Yúschenko busca la salida a la crisis política acercándose a la Unión Europea Uribe busca ahora un diálogo con las Farc sobre el canje humanitario
El presidente de Ucrania, Víctor Yúschenko, celebró ayer múltiples consultas para calmar la situación y explicar a la Unión Europea el alcance de la crisis política y las vías de su solución. Yúschenko, quien destituyó ayer el Gobierno de Yulia Timoshenko, se multiplicó para reunirse con los grupos parlamentarios, a los que propuso un pacto de estabilidad, y con el primer ministro interino, Yuri Yejanúrov, al que dio una semana para formar gabinete. También se reunió con los gobernadores de todas las regiones ucranianas y con los ministros en funciones de Defensa, Interior y Seguridad, y conversó por teléfono con el alto representante de la Unión Europea para la Política Exterior y Seguridad Común, Javier Solana, y con el presidente lituano, Valdas Adamkus. Solana, Adamkus y el presidente polaco, Aleksander Kwasniewski, con quien Yúschenko conversó la víspera, mediaron por la UE en la crisis política en Ucrania durante la Revolución Naranja de fines del 2004. Explicó a los representantes de la UE las medidas que emprende para superar la crisis provocada por el escándalo de corrupción. El Gobierno del presidente Álvaro Uribe esperaba la respuesta de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) a su propuesta para dialogar un acuerdo humanitario que permita intercambiar secuestrados por guerrilleros presos. La oferta del Ejecutivo la expuso el jueves por la tarde el comisionado de Paz, Luis Carlos Restrepo. Por primera vez desde que asumió el poder en el año 2002, el mandatario prometió una zona segura, salvoconductos y supresión de las órdenes de captura para los delegados de la guerrilla más antigua del continente americano. Por otra parte, un grupo de personalidades civiles que busca acercamientos de paz en Colombia pidió al premio Nobel de Literatura, Gabriel García Márquez, y al ex presidente del gobierno español, Felipe González, que participen como garantes en un posible diálogo.