Platzeck, originario de la Alemania comunista, nuevo líder del SPD
En un desesperado intento por acabar con la grave crisis que vive el SPD desde el lunes pasado, los líderes socialdemócratas decidieron designar a Matthias Platzeck, actual jefe del gobierno regional de Brandeburgo, como futuro presidente del partido. La designación de Platzeck fue aplaudida por todos los sectores de la socialdemocracia alemana y, algo raro en la política germana, también causó alivio y alegría en las filas de la democracia cristiana. La elección de Platzeck, cuya designación debe ser confirmada por las bases del partido en un congreso que tiene lugar el 14 y 15 de noviembre en Karlsruhe, pone fin a la crisis de liderazgo en el SPD y garantiza la continuidad de las negociaciones con la democracia cristiana para formar un Gobierno de coalición. «Hemos logrado un acuerdo y, además, hemos aprovechado la crisis para rejuvenecer y fortalecer al partido», dijo el vicepresidente del SPD, Wolfgang Thierse, al comentar el trascendental acuerdo alcanzado por la ejecutiva del partido. «Platzeck representa un estilo político nuevo y refrescante», añadió Ute Vogt, vicepresidenta del partido. Si se confirma la designación de Platzeck, el político de 51 años y, al igual que Angela Merkel, originario de la antigua Alemania comunista, reemplazará en el cargo a Franz Müntefering. «Es un gran honor para mí», admitió el futuro jefe del SPD, al aceptar la designación. «Ahora se trata de garantizar que las negociaciones para formar un Gobierno de gran coalición avancen velozmente», añadió. Satisfacción democristiana La elección de Matthias Platzeck fue recibida con beneplácito en las filas de la democracia cristiana, que a su vez está inmersa en otra peligrosa crisis después de que Edmund Stoiber anunciara su decisión de renunciar a la cartera de Economía en el futuro Gobierno. «Es una figura integradora y un factor de estabilización», dijo el jefe de gobierno de Sajonia Anhalt, el democristiano Wolfgang Böhner, mientras que el ministro del interior de Brandeburgo y jefe de la CDU en el estado, Jörg Schönbohm, destacó que la nominación de Platzeck representaba una firme garantía para que el SPD no diera un giro hacia la izquierda, como era el temor de la cúpula de la democracia cristiana. La rápida designación de Platzeck puso fin a la crisis en el SPD, pero todavía nadie se atreve a predecir que las negociaciones para formar el Gobierno de gran coalición culminen con éxito y dentro del plazo previsto.