Israel reanuda los asesinatos selectivos y mata con misiles a un líder de las milicias palestinas Máxima tensión en Egipto

Un avión israelí pilotado por control remoto disparó ayer tres misiles contra un vehículo en el que viajaba un comando de los Comités de Resistencia Popular en la franja de Gaza causando la muerte a uno de sus líderes e hiriendo a diez civiles de los que cuatro eran niños menores de diez años. El ataque señala la vuelta a los asesinatos extrajudiciales por parte de Israel, que el lunes autorizó al ejército a cometerlos en respuesta al último atentado suicida reivindicado por la Yihad Islámica que se cobró la vida de cinco personas en un centro comercial de Netanya. Los tres misiles alcanzaron de lleno al Subaru azul en el que viajaba Mohamed Arkan, un líder local de los Comités de Resistencia Popular, cuando el vehículo se desplazaba por una zona residencial del campo de refugiados de Rafá, en el extremo sur de la franja de Gaza. Arkan, de 29 años, falleció instantáneamente y una persona que le acompañaba, también miliciano de los Comités de Resistencia Popular, resultó herido de extrema gravedad. Los misiles causaron daños colaterales entre los viandantes que se hallaban en la zona y diez personas resultaron heridas, incluidos cuatro niños que anoche se encontraban en estado grave. El ejército confirmó la operación y señaló que Arkan lideraba las milicias Salá al Din de los Comités de Resistencia Popular y estaba implicado en el lanzamiento de cohetes Qasam y granadas de mortero contra Israel, así como en un número indeterminado de ataques contra los militares en el corredor Filadelfia que separa Egipto de la franja de Gaza y que Israel abandonó en septiembre. El ejército dijo que había pedido a la Autoridad Nacional Palestina que detuviera a Arkan, pero la policía de Gaza no había obrado como le pedían los israelíes. Un portavoz de los Comités manifestó que el primer ministro Ariel Sharón había cometido un grave error, máxime si se tiene en cuenta que los Comités no están cometiendo ataques y atentados en el interior de Israel. «Los israelíes lo van a pagar muy caro. Nuestra respuesta será rápida y dura, sin clemencia y sin dilación», dijo el portavoz. «Nos habíamos comprometido a respetar el alto el fuego pero Israel no lo ha respetado», añadió. Cambio de rumbo Mientras, el secretario general de Likud, Tzahi Hanegbi, anunció este miércoles su decisión de abandonar el partido para integrarse en Kadima, la nueva formación de Ariel Sharón, aduciendo que Sharón es el único político israelí que puede conducir al país en los difíciles momentos que por los que atraviesa. Sólo unas horas después de que Hanegbi comunicara su decisión, la policía entregó a la fiscalía el contenido de una investigación en la que se recomienda su procesamiento por varios cargos, incluidos los de corrupción y nepotismo, que se remontan a la época en que Hanegbi fue ministro de Medio Ambiente entre 2001 y 2004. Esta nueva deserción deja al Likud en una situación más difícil puesto que Hanegbi es uno de los políticos más extremistas de la Kneset y sin embargo ha optado por afiliarse a Kadima, un partido que promueve, aunque sea vagamente, una retirada israelí de parte de Cisjordania. De hecho, Hanegbi se opuso abiertamente al plan de desconexión de la franja de Gaza que Sharón llevó adelante pese a la oposición de los rebeldes del Likud. La última jornada de las elecciones parlamentarias celebrada ayer en Egipto se convirtió en una batalla campal, en la que murieron al menos cuatro personas en combates entre electores y policía. Los incidentes se concentraron en el delta del Nilo, bastión de la ilegalizada organización islamista moderada de los Hermanos Musulmanes. La hermandad fue la principal beneficiada en las dos primeras rondas, en las que logró quintuplicar sus escaños, pero su inexorable avance quedó frenado por los incidentes en esta última fase, en la que el Partido Nacional Democrático (PND) pugnaba por garantizarse la mayoría absoluta. «La Policía volvió a intervenir para evitar que la población pudiera ejercer su derecho. Tenemos noticia de que cuatro personas han perdido la vida en Damieta y Sharquiya», ambas poblaciones del delta, dijo el número dos de los Hermanos Musulmanes, Mohamed Habib. Junto a la extrema violencia, las irregularidades fueron una vez más la nota destacada de la jornada electoral, que dejó asimismo cientos de heridos y contusionados, y centenares de personas encarceladas. | h.s.