España entrega a Gotovina al Tribunal Internacional de La Haya

Los responsables del Ministerio del Interior sólo respiraron aliviados cuando a las 13:05 horas de ayer una llamada oficial desde Interpol-Holanda les notificó que el avión que transportaba a Ante Gotovina, el mayor criminal de guerra de Croacia, había aterrizado sin contratiempos en el aeropuerto de Rotterdam y que el supuesto genocida estaba ya bajo custodia de los funcionarios del Tribunal Penal Internacional para la Antigua Yugoslavia (TPIY). El traslado del primer criminal de guerra capturado en España comenzó a las 8:00, cuando dos furgonetas de las Unidades de Intervención de la Policía y varios vehículos camuflados del CNP llegaron a la puerta de la cárcel madrileña de Soto del Real. Al llegar a la periferia de la capital la caravana no se dirigió, tal y como se pensaba, a la base militar de Torrejón de Ardoz, sino que se encaminó hacia la base de Getafe. Fuentes del dispositivo de protección se limitaron a señalar que el cambio de aeropuerto se debió a «cuestiones de seguridad». Gotovina, vestido con un elegante traje, y su «séquito» llegaron minutos antes de las 9:00 horas a Getafe. Las puertas del recinto militar estaban ya abiertas y decenas de militares custodiaban el perímetro de la base. Allí, un avión de transporte de tropas del Ejército esperaba en pista con los motores encendidos y listo para despegar. No hubo tiempo para despedidas, sólo unos instantes para que el cámara de la Policía grabara las últimas imágenes del criminal de guerra en suelo español.