Una oportunidad para Europa

E L CONSEJO Europeo debate el nuevo marco financiero de la Unión para el periodo 2007-2013; es decir, la discusión sobre el nivel de gasto que permitirá a medio plazo alcanzar los objetivos políticos comunes. Y, en cambio, lo que está sobre la mesa es un recorte presupuestario, por lo que si no se varían las posiciones habrá menos recursos para la solidaridad regional, las políticas agrarias y los nuevos Estados miembros. La Unión Europea se enfrenta al reto de la ampliación, un desafío sin precedentes en términos políticos, económicos y sociales. Nunca antes una ampliación supuso un aumento de las diferencias en el desarrollo económico. Por eso, ahora más que nunca es necesario un presupuesto con más recursos que supere el 1,24 % del Producto Interior Bruto (PIB) que permita solventar las diferencias y aumente la calidad de vida de la ciudadanía europea. Responder a este desafío significa cofinanciar las políticas europeas en los Estados miembros menos desarrollados, tanto antiguos como nuevos, desde la base de la solidaridad, garantizar la coordinación entre las distintas políticas comunitarias en aras a la cohesión económica y social de los países socios, a la creación de empleo y al respeto a las decisiones tomadas en la reforma de la política agraria común. Porque el desafío de la Unión está precisamente ahora en recuperar los objetivos de la, ahora, anhelada Estrategia de Lisboa. Es decir, la transformación de la economía hacia el crecimiento sostenible basado en el conocimiento y en la innovación, crear más empleos y de más calidad, con mayor cohesión social y protección del medio ambiente. Ahora hay una oportunidad para Europa. Ese es el reto.