Kirchner ordena abrir todos los archivos militares secretos
El Gobierno argentino ordenó ayer la apertura total de los archivos secretos de las Fuerzas Armadas, medida que reclamaban los organismos de defensa de los derechos humanos para avanzar en el esclarecimiento de los crímenes de la última dictadura militar. La disposición fue adoptada por la ministra de Defensa, Nilda Garré, en vísperas del décimo tercer aniversario del golpe de Estado del 24 de marzo de 1976, que marcó el inicio de uno de los períodos más cruentos de la historia argentina. Garré «autorizó el pleno acceso a la documentación y bases de datos de las Fuerzas Armadas que puedan resultar de interés en las investigaciones de las violaciones masivas de los derechos humanos cometidas durante la última dictadura militar (1976-1983)», informaron fuentes oficiales. La resolución alcanza a los archivos del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas, de los estados mayores generales del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea, del Consejo Supremo de las Fuerzas Armadas y de «cualquier dependencia o repartición» del Ministerio de Defensa. «La medida adoptada por la ministra determina el levantamiento del secreto militar, en cuanto resulte necesario», precisó el Ministerio de Defensa en un comunicado. Mediante la decisión de Garré, la Secretaría de Asuntos Milita-res deberá garantizar «el acceso irrestricto a la información sobre los hechos gravísimos ocurridos en el país durante la dictadura militar». La documentación quedará a disposición del Archivo Nacional de la Memoria, institución creada en el 2003 por el presidente argentino, Néstor Kirchner. Los documentos militares pueden aportar pruebas a los juicios contra represores reabiertos en el 2003 tras la anulación de las leyes de Punto Final (1986) y Obediencia Debida (1987), que habían librado de responsabilidad a un millar de militares y policías que actua-ron en la «guerra sucia». Precisamente ayer, dos bombas caseras estallaron sin causar víctimas frente a sendos concesionarios de automóviles de Buenos Aires, un día antes de cumplirse 30 años del golpe de Estado.