Benedicto XVI pide una «tregua inmediata» en el conflicto entre Líbano e Israel
El papa Benedicto XVI expresó ayer su satisfacción por la apertura de un corredor humanitario en Líbano y agregó que tras esta medida la siguiente tiene que ser la «tregua inmediata». «Pienso que el corredor humanitario es un hecho positivo. Esperemos que la tregua se produzca inmediatamente», dijo el Pontífice a los periodistas que le siguen en estos días de vacaciones en la región alpina italiana del Valle de Aosta. Sobre la Jornada de Rezos y Penitencias que ha convocado para el próximo 23 de julio para que cese «inmediatamente» el fuego entre tropas israelíes y milicianos libaneses de Hizbulá, el Papa dijo que la buena acogida que ha tenido significa que «representa un hecho positivo». «Por ello, convoca para el domingo 23 de julio una jornada especial de plegarias y de penitencias, pidiendo a los pastores y fieles de todas las iglesias como a todos los creyentes del mundo a implorar a Dios el don precioso de la paz», señaló el Vaticano. El Obispo de Roma manifestó que la invitación es para todo el mundo, pero sobretodo a los cristianos, judíos y musulmanes. El Papa Ratzinger, que sigue la evolución de la crisis, dijo al convocar hace varios días esa jornada de oración, que el Líbano tiene derecho «a que se respete su integridad como país», que los palestinos tienen derecho «a una patria libre y soberana» e Israel «a vivir en paz en su Estado». «En este doloroso momento, Su Santidad hace un llamamiento a las organizaciones caritativas para que ayuden a todas las poblaciones afectadas por este despiadado conflicto», subrayó el Vaticano. 1397124194 Actitud por la paz Ayer, Benedicto XVI afirmó que aunque el Vaticano «no entra en política» sí hace todo lo posible por la paz. En ese contexto se enmarca la reunión que mantuvo hace dos días en el Vaticano el diputado libanés Saad Hariri, hijo del ex primer ministro asesinado Rafik Hariri, con el secretario de estado, el cardenal Angelo Sodano, al que pidió ayuda para un alto el fuego en su país tras los ataques de Israel. Dos días antes, el primer ministro libanés, Fuad Siniora, mantuvo una larga conversación telefónica con el cardenal Sodano y Hariri se entrevistó también con el presidente del Gobierno italiano, Romano Prodi, y el ministro de Exteriores, Massimo D'Alema.