Exige una indemnización porque la alerta terrorista provoca a la aerolínea 3,5 millones de pérdida
Ryanair da siete días a Blair para suavizar las medidas de seguridad en los aviones Raúl Castro lanza las primeras señales tras asumir el poder en Cuba
La compañía asegura que son ineficaces, sin sentido y dan a los terroristas una victoria propagandística
La aerolínea de bajo coste ir-landesa Ryanair lanzó ayer un ultimátum al Gobierno británico para que en el plazo de siete días restablezca las medidas de seguridad aeroportuarias anteriores a las adoptadas tras desbaratarse un complot terrorista la semana pasada. De lo contrario, la línea aérea amenaza con demandar al Ejecutivo, para exigir una indemnización. El dueño y director general de la compañía aérea, Michael O'Leary, flanqueado por una figura de Winston Churchill, lanzó la advertencia al Gobierno de Tony Blair, calificando las nuevas medidas de seguridad que se aplican desde el pasado día 10 en todos los aeropuertos británicos como «sin sentido, medidas ineficaces que lo único que hacen es bloquear los aeropuertos». O'Leary también dijo que la postura de las autoridades aeroportuarias británicas lo único que logra es entregar en mano «una victoria publicitaria a los extremistas». Ryanair ha perdido desde que se lanzara la alarma en los aeropuertos británicos unos 3,5 millones de euros en cancelaciones de vuelos. Su objetivo ahora es que se restablezca el tamaño anterior del equipaje de mano, un 20% mayor que lo que se permite en estos momentos, y que se vuelva a registrar a uno de cada cuatro pasajeros, ya que lo contrario exige más personal de tierra, disminuyendo los beneficios. «Si el Gobierno restablece los niveles de seguridad aeroportuarios exigidos por la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA, sus siglas en inglés), Ryanair no se querellará exigiendo las compensaciones que nos corresponden según la Sección 93 de la Ley de Transporte del año 2000», indicó O'Leary. El Ministerio de Transporte británico emitió un comunicado en el que mostraba la intención del Ejecutivo de «no comprometer la seguridad de los pasajeros». Y agregó: «Tampoco vemos un cambio de política a este respecto en los próximos siete días.» El Gobierno impuso las medidas de equipaje y seguridad aplicando la Ley de Seguridad en Aviación de 1982, por lo que cualquier demanda será contestada judicialmente. El Ministerio de Interior confirmó ayer que personal de todos los cuerpos policiales del Reino Unido se hayan trabajando en la investigación sobre los sucesos de la pasada semana. Los 43 cuerpos de Scotland Yard en Inglaterra y Gales, los ocho de Escocia y el Servicio Policial del Ulster, han enviado personal para apoyar la investigación.Ayer continuaban las investi-gaciones en el bosque de High Wycombe donde supuestamente se ha encontrado una maleta cargada con equipo explosivo. Además se han registrado en Gran Bretaña 36 viviendas y 20 vehículos. Las primeras declaraciones de Raúl Castro, presidente en funciones de Cuba, despejan algunas dudas sobre el complejo momento que vive el país pero abren también una larga lista de incógnitas sobre el futuro. En su primera entrevista concedida a Granma , órgano oficial del Partido Comunista de Cuba, señala que Fidel Castro sigue una recuperación «satisfactoria y gradual», que el país se mantiene en calma pero que las tropas están movilizadas ante la «amenaza» de EE.?UU. y lanza también un mensaje conciliador a Washington. «A estas alturas, deberían (EEUU) tener claro que con imposiciones y amenazas no es posible lograr nada de Cuba», señala. «Siempre hemos estado dispuestos a normalizar las relaciones en un plano de igualdad. Lo que no admitimos es la política prepotente e injerencista que con frecuencia asume la actual administración de ese país», afirma. Unas palabras en las que los analistas ven un mensaje «calor» a Bush y la asunción del poder en lugar de Fidel Castro.