Solana se muestra dispuesto a buscar la próxima semana una solución diplomática
La UE descarta imponer sanciones a Teherán y prefiere seguir dialogando Otro Tupolev se estrella causando 29 muertos
EE.UU. asegura no estar al tanto de la mediación en la crisis de Felipe González
El camino de EE.UU. para imponer sanciones a Irán en el Consejo de Seguridad será arduo, no sólo por la oposición de Rusia y China, sino también por el planteamiento más conciliador de la Unión Europea. Los ministros de Exteriores de la UE, reunidos en Lappeenranta (Finlandia), evitaron ayer evocar la posibilidad de aplicar sanciones a Irán por su negativa a detener el enriquecimiento de uranio como exigía la ONU. «Teniendo en cuenta que vamos a tener un período de discusiones, no sería razonable avanzar» con las sanciones, dijo su alto representante en Política Exterior, Javier Solana. En efecto, Solana tiene previsto reunirse a principios de la semana próxima con el negociador iraní, Alí Lariyani, para seguir buscando una solución diplomática a la crisis nuclear. Por su parte, Rusia advirtió ayer que no apoyará un posible ultimátum a Teherán. «No podemos sumarnos al ultimátum que encierran a todos en atolladeros», dijo el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, quien abogó por el «diálogo y no por el ais-lamiento y las sanciones». La presión estadounidense choca por ahora con la negativa rusa y china a adoptar sanciones, mientras que las autoridades iraníes parecen aprovecharse de esa disputa y mantienen su discurso desafiante. «Nuestros enemigos deben saber que el pueblo iraní mantiene firmemente su defensa de su derecho y no cederá ni un ápice en su derecho a (la energía) nuclear», sostuvo el presidente Mahmud Ahmadineyad en un discurso difundido por la televisión estatal. Mientras, la supuesta «mediación» de Felipe González se encaminaba ayer hacia la polémica, pues el Gobierno español le «agradecía su esfuerzo» pero Washington y la UE afirmaban desconocer tal misión. Solana dijo que no estaba al tanto de ninguna mediación del ex presidente. Desde el Departamento de Estado norteamericano, la respuesta fue similar. «No estoy al tanto de la existencia de esfuerzos de mediación», declaró su portavoz Sean McCormack. Según Fernández de la Vega, González comunicó «su intención de entrevistarse con el presidente iraní para trasladarle la urgente necesidad de que los Estados trabajen por la paz. Veintiocho personas murieron ayer al incendiarse un avión de pasajeros iraní durante el aterrizaje en el aeropuerto de la ciudad de Mashad, lugar donde se encuentra el santuario más sagrado de Irán. De los 148 pasajeros y tripulantes, 62 resultaron ilesos y 47 fueron hospitalizados. El aparato, un Tupolev 154 de fabricación rusa, se estrelló e incendió después de que un neumático del tren de aterrizaje estalló mientras tocaba tierra, según un responsable local que pidió el anonimato. Otro Tupolev 154 se accidentó el pasado 22 de agosto en el este de Ucrania muriendo las 169 personas que iban a bordo.