Destruir los cultivos de droga

Las Naciones Unidas apelaron a la Otan a asumir un nuevo papel en Afganistán y llevar a cabo una «robusta acción» para destruir el cultivo de la adormidera, que se incrementó en un 59% este año y sirve para financiar a los insurgentes en el sur del país. «Tenemos una guerra en dos frentes», dijo el jefe de la Oficina de la ONU para Drogas y Crimen, Antonio María Costa. Costa, quien estuvo acompañado del ministro afgano antinarcóticos, Habibulá Qaderi, pidió «más recursos» y «un nuevo mandato» para la Otan para que pueda combatir a la industria de la droga, al recalcar que financia los salarios de los talibanes y sus armas. La Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad en Afganistán de la Otan, inmersa desde hace días en la mayor ofensiva terrestre de su historia en el sur de Afganistán, ha pedido refuerzos para hacer frente a la inesperada resistencia de los talibanes, pero siempre ha dicho que la lucha contra el narcotráfico corresponde a la comunidad internacional y al Gobierno afgano.