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| Análisis | La cumbre cubana de los países no alineados |

El «eje del mal», cerca de EE.UU.

La Habana saca partido a la reunión de los «enemigos» de Washington, pero otros países también aprovechan la cita para lograr apoyos a sus interes internacionales

Publicado por
Silvia Ayuso - la habana
León

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Justo en momentos en que Estados Unidos se ve más cuestionado que nunca por su lucha contra el terrorismo, a poco más de un centenar de kilómetros de su costa, en la archienemiga Cuba, se concentra el mayor número de países a los que Washington ha incluido en el «eje del mal» o, cuanto menos, considera «non gratos». Jefes de Estado y de Gobierno, o altos representantes de Corea del Norte, Irán, Siria, Venezuela, Zimbabue, Myanmar o Bielorrusia viajaron o van a hacerlo a La Habana, sede de la XIV Cumbre de Países No Alineados (Noal) y declarada estos días la «capital del Tercer Mundo». Presidentes como el iraní Mahmud Ahmadineyad o el venezolano Hugo Chávez acudirán a la cita cubana, mientras que hasta el último minuto se mantiene abierta la posibilidad de que el convaleciente comandante Fidel Castro haga una aparición estelar, y, por lo menos, inmortalice en una «foto de familia» la presencia de «archienemigos» estadounidenses de la talla de Ahmadineyad o del sirio Bashar el Asad. «No me queda más remedio que imaginar que está creciendo el eje del mal, y si vamos a guiarnos por algunos despachos de prensa, pronto va a estar integrado por 118 naciones, o sea, las que inte-gran Noal», ironizó el martes el viceministro del Exterior cubano, Abelardo Moreno. EE.UU. también estaba invitado, aunque por un mero formalismo, dado que estuvo presente en la cumbre de hace tres años en Malaisia Aliados, pocos Y es que aunque a la cita cubana también acuden algunos de sus aliados, como el presidente paquistaní, Pervez Musharraf, o el primer ministro indio, Manmohan Singh, la cumbre tiene un «aire» antiestadounidense camuflado bajo un llamamiento a defender el «multilateralismo». De hecho, en el proyecto de declaración final aparecen numerosas críticas a la política internacional norteamericana: rechazo rotundo del término «eje del mal» por cierto Estado para estigmatizar a otros con el pretexto de la lucha contra el terrorismo. Se condena a Israel por la «despiadada agresión contra Líbano», y por su intento de imponer una «solución unilateral ilegal» en el conflicto con los palestinos, y se reafirma el «apoyo incondicional (...) a la justa demanda de Siria de reinstaurar la plena soberanía en el Golán sirio ocupado». Por el contrario, Noal se posiciona a favor de enemigos de Washington. Irán, Venezuela y Cuba En el caso del primero, reafirman el derecho a la investigación, producción y uso de la energía nuclear con fines meramente pacíficos. A Venezuela se le dedican tres párrafos del texto en los que se «considera con preocupación las políticas agresivas de Estados Unidos» apra con ella. Plataforma para la ONU Pero la cumbre también ame-naza con convertirse en un agitado centro de campaña de intereses particulares: Venezuela no oculta que busca apoyos a su candidatura a un puesto no permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU frente a Guatemala, promocionada por Estados Unidos.