Duras críticas de Villepin a la política de EE.UU. y por la solidez europea
El primer ministro francés, Dominique de Villepin, arremetió contra Estados Unidos por haber incrementado la «hostilidad contra Occidente» con la guerra en Irak, al tiempo que instó a la Unión Europea (UE) a hacer «su revolución» y propuso la creación de un Consejo Económico Mundial. A seis meses de las elecciones presidenciales en Francia, Villepin, que oficialmente no tiene ambiciones para presentarse al Elíseo, se mostró ha favor de que las cuestiones internacionales figuren «en el corazón» del debate electoral, en un discurso ante universitarios. Muy crítico con la Administración estadounidense, Villepin, ya conocido por su discurso en febrero de 2003 ante el Consejo de Seguridad Naciones Unidas contra la intervención en Irak, mantuvo que esa intervención militar estaba «abocada al fracaso y al caos». «El Gran Oriente Democrático que Estados Unidos quería construir no ha emergido y la guerra, al contrario, ha aumentado el miedo, las divisiones, la inestabilidad y la hostilidad contra Occidente», afirmó Villepin en la universidad de Lille II (norte de Francia). La guerra en Irak ha abierto un «círculo vicioso» y una nueva «fractura» en la región de Oriente Medio, además de debilitar «las instancias multilaterales», dijo. Peligro para Europa Otro efecto pernicioso, según Villepin, es que «ha hecho más difícil la acción de la comunidad internacional frente a las grandes crisis de proliferación, como Irán o Corea del Norte, ha complicado la solución del problema israelo-palestino y dividido Europa, que no ha recuperado su unidad política». Irak es «un laboratorio para el terrorismo internacional» y los franceses que han ido a ese país a hacer la «yijad» pueden ser en el futuro «un peligro para Francia y para Europa», advirtió. Villepin instó a la Unión Europea a que haga «su revolución» y «retome en su mano el destino» para «controlar el mundo exterior e imprimirle su marca». Los franceses no quieren que Europa «ceda a las presiones de otras potencias económicas», «renuncie a su ambición social» y se transforme en una zona de libre cambio», agregó el carismático político galo.