| Crónica | Virtual estado de sitio |
«Nose sabe quién es el mando de seguridad»
Un hombre protege a dos niños en los choques de Ramala
Encapuchados de Hamás se desplegaron en el centro de la ciudad de Gaza, mientras las calles aledañas están desiertas. Un día después del tiroteo contra el convoy del primer ministro, Ismail Haniya, Gaza parece en estado de sitio. La calle número 1, una de las principales arterias, está repleta de combatientes. Unos apostados en los techos y otros al volante de camionetas bloqueando la avenida. A dos pasos, en el estadio Yarmuk, se festejan los 19 años del nacimiento del movimiento creado por el jeque Ahmed Yasín, asesinado por Israel en el 2004. «Desplegamos nuestras fuerzas para proteger la celebración. La situación es extremadamente tensa, pero impediremos todo enfrentamiento entre los grupos», afirma un responsable de las Brigadas Ezzedin Al Qassam. En el accceso al estadio, con la cinta verde del grupo en la cabeza y un Kalashnikov o un lanzacohetes en la mano, algunos Hamsawi, combatientes de Hamás, acusan a Al Fatah de querer provocar un «golpe de Estado». A unos 500 metros, personal de la Seguridad Nacional controla un cruce y observa pasar los vehículos de sus rivales. «La situación no es normal. Es el caos total. Hay tentativas de secuestros, choques armados, despliegues de Hamás en Jabaliya, en Gaza», exclama Ahmed, un agente fiel al presidente Abas.